Leopoldo Romañach, quién falleció en La Habana el 10 de septiembre de 1951, fue un  destacado pintor cubano.

Su nacimiento tuvo lugar el 7 de octubre de 1862, en el poblado de Sierra Morena en Corralillo, en la provincia de Las Villas. Su padre era de origen catalán y su madre cubana.

Cuando tenía cinco años al morir su madre, el padre lo lleva a Barcelona, donde vivió hasta la adolescencia. Regresa a Cuba a los 18 años.  Reside en Caibarién.

Su padre, que era  comerciante quiso dedicarlo al giro, pero sus aficiones eran diferentes. Y aunque ayuda en el comercio dibuja en los ratos libres. El padre lo comprende y lo deja marchar a La Habana.

En 1885 cursa estudios en la escuela San Alejandro, donde obtuvo en dos años las notas más altas. Después viaja a New York y estudia a los grandes maestros.  Regresa a Cuba pero su inconformidad con el medio artístico y político, sus relaciones con elementos independentistas, influyen para que se marche nuevamente  y viaja a Europa. Entonces continúa estudiando en Roma.  En la capital italiana se desarrolló a plenitud y regresa  otra vez a Cuba, lleno de lauros y éxitos. Se le nombró profesor en la Escuela de San Alejandro.

En 1900 obtiene Medalla de Bronce en la "Exposición Universal de  París", así como   Medalla de Oro en la "Exposición de San Luis", Missouri, en 1904; Gran Premio en la "Exposición de La Habana" en 1908;  Medalla de Honor en la "Panama Pacific International Exposition" de San Francisco, California en 1915 y Gran Premio en la "Exposición Iberoamericana de Sevilla" de 1929-1930.

Todo esto originó que se le confiriera el título de Miembro del Círculo Artístico Internacional de Roma; miembro de Número de la Academia Nacional de Artes y Letras de Cuba; la Medalla de Honor del Círculo de Bellas Artes y la Cruz Orden de Carlos Manuel de Céspedes, entre otros méritos que conquistó por su preclara labor y honradez profesional. También Leopoldo Romañach fue nombrado Profesor Emérito  y Director Honoris Causa de la  Escuela Nacional de Bellas Artes San Alejandro y su Anexa. Preparó a varias generaciones de pintores que harían entrar a Cuba en la historia de la pintura moderna.

Romañach fue un pintor que se expresó de acuerdo a su formación italiana.  Entre sus obras se encuentran   Retrato de una  alumna, Campesino Italiano, En el huerto, Vuelta del trabajo, De la fuente, 

Mi discípulo Serra, Montañesa de Scanno,   Gaitero Romano,  Mendigo Romano y El Ermitaño.