ZOILA GALVEZ
Zoila Gálvez nació el 19 de marzo de 1899 en Guanajay, eminente figura del arte lírico cubano y destacada personalidad cultural, estuvo además vinculada durante años a los movimientos progresistas y revolucionarios de nuestro país. Llegó a ser una soprano de excepcionales facultades y cualidades expresivas de gran originalidad. Por su talento artístico se convirtió en una especie de leyenda e impresionó hasta impresionar a sectores populares no vinculados generalmente al canto lírico.
Cuando tenía dos años quedó huérfana de madre. Desde su infancia entró en contacto con la música puesto que su padre le compró un piano y además contrató a un profesor para que le impartiera clases. Tenía ella 10 años cuando su familia se trasladó hacia La Habana y entonces pudo continuar estudiando en el Conservatorio Nacional Hubert de Blanck, en el cual se gradúa en noviembre de 1916. En 1917 decide matricular en la asignatura de canto del propio conservatorio lo que finaliza tres años más tarde. Entonces se trasladó a Milán, Italia. Allí recibe clases de perfeccionamiento con uno de los más relevantes maestros de canto de ese país y realiza su primera presentación pública en la Sala de Conciertos del Conservatorio de Milán. Obtuvo un gran éxito. Posteriormente ofreció recitales en diversos teatros y salas de conciertos. Después viajó a Inglaterra, Francia, España y Estados Unidos de América.
Zoila Gálvez tras haber realizado una extensa gira por varios países retornó a Cuba donde recibió un caluroso recibimiento por parte de instituciones públicas y privadas, amistades y pueblo en general. Incluso por acuerdo del Ayuntamiento fue declarada Hija Adoptiva de La Habana, con medalla de oro, por haber puesto muy alto el nombre de Cuba con su labor artística. También fue declarada Hija Predilecta de Guanajay.
En La Habana ofreció conciertos y el público le prodigó muchos elogios. En 1924, después de haber realizado un viaje infructuoso a los Estados Unidos salió hacia Francia y al año siguiente se trasladó a España donde fue contratada para cantar una serie de conciertos en una de las emisoras más importantes de Madrid y también se presentó en el Teatro Real de la capital española. Al conocer que su padre estaba grave retornó de inmediato a Cuba. Después que éste se mejoró continuó en sus actividades artísticas y en 1926 se presentó como solista con la Orquesta Sinfónica de La Habana bajo la dirección de Gonzalo Roig. En ese mismo año fue nombrada profesora auxiliar de canto de la Escuela Municipal de Música de La Habana. Poco tiempo después de haberse producido el fallecimiento de su padre volvió a dirigirse hacia los Estados Unidos. Trabaja entonces en una compañía de revistas musicales con la cual recorre casi todo el territorio norteamericano. En enero de 1929, ya de regreso en Cuba, se presentó nuevamente con la Orquesta Sinfónica de La Habana y con el decursar de los años continuó cosechando éxitos y además siguió ejerciendo como profesora.
Zoila Gálvez recibió por su meritoria labor múltiples reconocimientos y distinciones, entre ellos Artista ilustre de Italia, la Orden de Mérito Carlos Manuel de Céspedes y la distinción por la Cultura Nacional. En 1972 se jubiló de manera oficial y al año siguiente realizó su última aparición en el programa de televisión Álbum de Cuba. El 26 de noviembre de 1985 falleció en La Habana.