René Márquez fue un músico, compositor y cantante de destacada trayectoria   desde la década de los años  treinta  del  siglo veinte  en Cuba. Su nacimiento tuvo lugar el  9 de septiembre de 1914, en Caibarién, en la actual provincia de Villa Clara, ubicada en la parte central de Cuba. En la etapa de su juventud aprendió el oficio de mecánico dental y a la vez aprende a tocar la guitarra de manera autodidacta.  Los iniciales pasos en el arte los dio en el poblado de Remedios. Allí ofrecía serenatas y compuso las primeras obras.

En 1930 René Márquez debuta como cantante en la orquesta Cervantes dirigida por Bellín Domenech.  Dos años más tarde canta  como solista en una emisora de radio de Caibarién acompañado al piano por Juan Bruno Tarraza,  quien fuera posteriormente un afamado pianista  y también por Bellín Domenech. En 1937 llega a La Habana, para incorporarse a una orquesta. Posteriormente trabaja en distintas agrupaciones, entre ellas la Orquesta Arcaño y sus maravillas. En 1939 él estrenó el bolero No te importe saber, que marcó un hito en la historia del género por el novedoso trabajo melódico-armónico. 

Esta creación grabada para la firma disquera RCA Víctor por Miguelito Valdés con la Orquesta Casino de la Playa, obtuvo inmediata repercusión en otros países latinoamericanos y en Estados Unidos de América. Su consagración definitiva se produjo cuando ingresa en la década del cuarenta en el siglo pasado en la orquesta de Julio Cueva, donde permaneció por espacio de diez años. Con dicha agrupación se presentó en diferentes lugares de Cuba así como en la radio y realizó grabaciones.

Posteriormente él decidió  reemprender el camino como cantante independiente hasta que en 1970 ingresa en la agrupación Tanda de Guaracheros del Consejo Nacional de Cultura, agrupación que posteriormente dirigió.  La obra autoral de René Márquez  comprende canciones como Espontáneamente, Ven junto a mí,  En el cielo de mi vida, Es la ilusión, La vida es un momento y Puede una flor, todas realizadas en tiempo de boleros. En el género de guaracha, creó Jícara, El grano de maíz, siendo la más popular, Soltando chispa.

Igualmente forman parte de su cosecha autoral  los boleros, Colegiala, Chagara y cuchillo, Te deseo felicidades, Se Formó, Para que mueras de amor, El granito de maíz y San Lázaro. Muchas de sus obras han sido interpretadas  por su hija Beatriz, catalogada en Cuba como la musicalísima por sus grandes condiciones como cantante. Fallece en  La Habana el 23 de diciembre de 1986.