PEDRO MANUEL SARRÍA TARTABULL
Pedro Sarría Tartabull, quien falleció en La Habana, el 29 de septiembre de 1972, víctima de una prolongada enfermedad, ocupa un lugar en la historia de Cuba de manera esencial por su digna y firme actitud cuando el primero de agosto de 1953 capturó a Fidel Castro y a otros dos de los asaltantes del cuartel Moncada, y supo garantizarles la vida.
Tras el ataque a la instalación militar santiaguera, el 26 de julio de 1953, al no poder lograr su ocupación, Fidel retornó a la granjita Siboney y seguidamente intentó dirigirse hacia las montañas orientales para proseguir la lucha.
Cuando se hallaba dormido en un bohío deshabitado muy extenuado por las largas marchas realizadas por zonas rurales resultó sorprendido por un pequeño grupo de soldados encabezados por el teniente Sarría.
Éste ordenó a sus subalternos que no le dispararan y no sólo ello sino que en el traslado de los prisioneros hacia Santiago de Cuba, no aceptó entregárselos a un oficial superior y continuó llevándolos en dirección al Vivac de la ciudad de Santiago de Cuba.
Eso garantizó que Fidel no resultase asesinado, como ya había ocurrido con la mayoría de los combatientes que habían sido localizados y detenidos. Pedro Sarría nació el primero de enero de 1900 en una finca ubicada en el ingenio La Caridad, cerca de la ciudad de Cienfuegos.
De procedencia muy pobre, tuvo una infancia difícil. Desde pequeño laboró en el campo y en la zafra para ayudar a su padre en el sostén de la familia. Al cumplir los 18 años, con el propósito de forjar su futuro, marchó a la provincia de Oriente. Allí desempeñó diferentes labores: fue carretero, hachero, cortador de caña, carretero, y jornalero, trabajos que no le permitieron mejorar su situación económica. Entonces, animado por obtener mayores ingresos, decidió alistarse en 1925 en el Ejército.
Varios días después de haberse producido el triunfo dela Revolución Sarría acudió a ver a Fidel a su llegada a La Habana el8 de enero de 1959 al frente de la Caravana de la Libertad. Fidel se sorprende al ver qué estaba vivo.
Él le explicó que poco tiempo después de haber mantenido una actitud firme que en la práctica evitó fuese asesinado cuando lo capturó en 1953 decidieron licenciarlo del ejército.
A Sarría entonces Fidel le señaló que le otorgaba el grado de Capitán del Ejército Rebelde. Resultó también nombrado edecán presidencial. Se identificó plenamente con el naciente proceso revolucionario. Además asumió la tarea de superarse de forma permanente para contribuir con sus conocimientos al desarrollo del país.
En la Universidad de La Habana terminó las carreras de Licenciado en derecho diplomático y consular y la de Licenciado en derecho administrativo. Llegó incluso a alcanzar la condición de Doctor en Ciencias Sociales y Derecho Público, respectivamente.