1897. Nace en La Habana José Antonio Fernández de Castro.

Se graduó de Doctor en Derecho en la Universidad de La Habana.

A través de su existencia se desarrolló como un notable escritor, periodista, diplomático, traductor y profesor. Integró el Grupo Minorista y participó en la llamada Protesta de los Trece, motivo por el cual resultó encarcelado.

Fue miembro de la Academia de Historia de Cuba y de la Academia Nacional de Historia y Geografía de México.

Dirigió la página literaria del Diario de la Marina, desde la cual fue un gran animador de la literatura de vanguardia. Fue uno de los primeros escritores cubanos en estudiar la obra de los poetas de la Revolución de Octubre.

Su fallecimiento ocurrió en La Habana el 30 de julio de 1951.

1955. Fallece en La Habana Antonio María Romeu.

Su nacimiento tuvo lugar en el poblado de Jibacoa, entonces provincia de La Habana, el 11 de septiembre de 1876.

A la edad de ocho años comenzó sus estudios musicales con un sacerdote de su localidad natal. Ya a los 11 años él tocó por primera vez en un baile y cuando tenía doce compuso su primera creación musical. Creó con posterioridad el danzón Lindas Cubanas que constituye un ejemplo del tratamiento de las fórmulas pianísticas a la hora de interpretar un buen danzón. También se le consideró como el mejor compositor de Danzones que se hayan elaborado para flauta de madera de cinco llaves ya que sus composiciones escritas con solos de flauta, se estiman como un tratado de interpretación y ejecución para dicho instrumento.

Fue conocido con el sobrenombre El Mago de las Teclas atendiendo a su maestría al tocar el piano. En su trayectoria musical compuso más de 500 temas.

1994. Se entregó en La Habana por primera vez el Premio Nacional de Artes Plásticas. Le fue conferido al destacado pintor cubano Raúl Martínez.

Constituye el más alto galardón que otorga el Consejo Nacional de Artes Plástica en Cuba.

Se concede anualmente a un creador cubano de esa especialidad, vivo y residente en Cuba, por el conjunto de los trabajos en un período largo de su existencia, y por el aporte valioso al desarrollo y la historia de las artes visuales cubanas. Se miden por los jurados que otorgan el Premio, los logros más relevantes del creador, tanto por su trascendencia como por su proyección nacional e internacional. El jurado lo integran reconocidas personalidades vinculadas a las artes plásticas que deben emitir su veredicto a partir de las nominaciones propuestas por una veintena de instituciones nacionales de la Cultura.