1897. Nace en La Habana Víctor Manuel García.

Su vinculación inicial con la pintura se produjo en forma casi accidental cuando todavía era un niño. En compañía de su padre visitaba la Academia San Alejandro, donde su progenitor trabajaba.

Algunos de sus primeros trazos o manchas atrajeron la atención de Leopoldo Romañach, el más prestigioso profesor de la Academia en esos instantes. Apreció el talento en el joven y lo alentó a adentrarse en el fascinante mundo de la pintura.

En 1924 realizó su primera exposición en una galería y a partir de ahí comienza su inquietud por lo nuevo que se hace sentir en el ambiente de la pintura nacional. En 1929 creó Gitana Tropical que sería su obra más famosa. Solía recorrer la zona de la Habana Vieja con sus pinceles dentro de una bolsa de papel. Sin cátedra oficial donde profesar convirtió toda acera en asignatura y cada muestra de sus obras en una especie de asamblea abierta.

Su fallecimiento ocurrió en La Habana el 2 de febrero de 1969.

1922. Nace en La Habana Cesar Portillo de la Luz.

Se inició en el canto acompañado de su guitarra cuando contaba 19 años.

Durante la década de los años cuarenta en unión de otros jóvenes que después alcanzarían gran popularidad como compositores e intérpretes, formó parte del denominado Movimiento del Feeling.

En 1956 se presentó en el célebre cabaret Sanc Souci con un grupo bajo su dirección. Con el decursar del tiempo como canta autor continuó obteniendo éxitos al presentarse en diferentes centros nocturnos, teatros, así como en la radio y la televisión.

También durante su larga y fecunda trayectoria artística realizó giras por diferentes escenarios de Europa y América.

Una de sus composiciones más famosas es la conocida por el nombre de Contigo en la Distancia, que ha sido interpretada por múltiples intérpretes.

Su fallecimiento ocurrió en La Habana el 4 de mayo de 2013.

1964. El Comandante en Jefe Fidel Castro pronuncia un discurso en la clausura de la primera Plenaria Nacional del Transporte.

Fue celebrada en el teatro de la Central de Trabajadores de Cuba. Fidel expresa: “Pero lo que importa dentro de una revolución es la prontitud, la eficacia, con que los problemas inevitables, los errores inevitables, la desorganización inevitable, se superen. Y esa es la lucha de hoy, esa es la batalla de hoy. No tengo la menor duda de que cuando —en años venideros— volvamos la vista hacia atrás, no solo nos admiremos de lo que se haya hecho sino, incluso, nos admiremos todavía más de todo lo que se haya hecho partiendo prácticamente de cero y cómo se haya podido hacer cuando prácticamente nadie sabía de nada, cuando prácticamente todo tuvo que aprenderse sobre la marcha, cuando prácticamente todo hubo de hacerse nuevo”.