El Primero de Enero es una de las fechas imprescindibles de Cuba.  Desde 1959 este día para los cubanos  no sólo marca el comienzo de otro año sino que sobre todo es un símbolo por reflejar la victoria de la Revolución.

Precisamente un destacado poeta cubano, Jesús Orta Ruíz, identificado  también como el Indio Naborí, en una obra escrita poco tiempo de haberse producido el triunfo revolucionario, detalló el simbolismo de esa fecha al precisar:

            ¡Primero de Enero!

           Luminosamente surge la mañana. 

          ¡Las sombras se han ido! Fulgura el lucero

          de la redimida bandera cubana.

          El aire se llena de alegres clamores.

          Se cruzan las almas saludos y besos,

          y en todas las tumbas de nobles caídos

          revientan las flores y cantan los huesos.

En horas de la madrugada de ese día se desmembró el régimen dictatorial con la fuga del país del tirano.

Entonces un grupo de elementos reaccionarios, que propiciaron que el dictador lograra salir de Cuba y eludiese así el castigo que merecía por los crímenes que se habían cometido, realizaron una maniobra con el fin de evitar un auténtico triunfo popular y revolucionario.

Pero Fidel que se hallaba ya en la ciudad de Palma Soriano  durante la ofensiva que llevaba adelante el Ejército Rebelde en la provincia de Oriente y estaba dispuesto a librar la batalla por la ocupación de Santiago de Cuba, instó ordenó a los  combatientes rebeldes a mantener en alto las banderas de la lucha.

Igualmente ordenó a  los Comandantes Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara, quienes en la parte central de Cuba, en la provincia de Las Villas, habían dirigido importantes batallas, dirigirse de inmediato hacia La Habana para ocupar  el campamento militar de Columbia, la mayor de las instalaciones militares, y el Castillo de San Carlos de La Cabaña. 

Posteriormente  llamó al  pueblo a  decretar una  huelga general revolucionaria.

Todo ello hizo posible que la maniobra de los elementos reaccionarios fuera destruida con prontitud y se garantizara el triunfo de la Revolución.

Desde 1959 el 1ro de enero ha sido conmemorado con una especial significación en Cuba. Se han realizado actos de especial trascendencia, concentraciones populares, desfiles militares y populares así como marchas del pueblo combatiente.

En 1984, por ejemplo,  en el acto que se celebró en Santiago de Cuba con motivo del vigésimo quinto aniversario del triunfo de la Revolución se le otorgó a esa  histórica ciudad el Título Honorífico de Héroe de la República de Cuba y la Orden “Antonio Maceo”. En esa oportunidad al hablar en el acto Fidel destacó al referirse a Santiago de Cuba: 

“A ti te honramos especialmente hoy, y contigo a todo nuestro pueblo, que esta noche se simboliza en ti.”

Y también Fidel enfatizó:

“¡Que siempre sean ejemplo de todos los cubanos tu heroísmo, tu patriotismo y tu espíritu revolucionario! ¡Que siempre sea la consigna heroica de nuestro pueblo lo que aquí aprendimos: Patria o Muerte! ¡Que siempre nos espere lo que aquí conocimos aquel glorioso Primero de Enero: la victoria!  ¡Gracias, Santiago!

Los habitantes y residentes en la capital cubana saludan a los santiagueros, y a toda Cuba en general, en este  Primero de enero, en el que se entrelazan simbólicamente el aniversario 65 de la Revolución y el 40 de habérsele otorgado a Santiago de Cuba el título honorífico  de Héroe de la  República de Cuba y la Orden “Antonio Maceo”, así como el comienzo del 2024 en el que nuestro pueblo continuará con el vigor y la decisión que le son característicos llevando adelante una fructífera labor con el objetivo de encarar y vencer dificultades y limitaciones y con ello continuar propiciando el desarrollo de la sociedad socialista.

Cuba sigue y seguirá siendo un faro, un símbolo, para múltiples hombres y mujeres en diferentes partes del mundo.

Al iniciarse este 2024 los cubanos inspirados en el legado de figuras cimeras de nuestra historia, como son los casos de José Martí y Fidel Castro, respectivamente  continuarán haciendo realidad, precisamente, los principios que ellos proclamaron.

Al respecto recordamos que Martí aseguró:

“Cuba no anda de pedigüeña por el mundo: anda de hermana, y obra con la autoridad de tal.”

Y Fidel igualmente enfatizó:

“La Revolución tiene  obstáculos delante, no puede hacer las cosas a la perfección, tiene sus errores, pero la Revolución tiene un perenne propósito de superarse y de rectificar en aquellas cosas en que no haya estado acertada. Lo que no hará jamás la Revolución es contemporizar con una negación de los principios por los cuales hemos estado luchando y el pueblo es quien debe  ayudarnos señalándonos, aportando pruebas de aquellas cosas que a su juicio constituyan una violación del principio revolucionario…”