1933.  Fallece en La Habana Eusebio Hernández Pérez.

Su nacimiento tuvo lugar en el poblado de Colón, provincia de Matanzas, el 18 de enero de 1853.

Desde muy joven se incorporó a la lucha por la independencia de Cuba. Participó en las tres etapas de la guerra. La primera conocida como la Guerra de los Diez Años comenzó con el Grito de Yara en 1868 en la finca La Demajagua que pertenecía a Carlos Manuel de Céspedes. La segunda fue la Guerra Chiquita (1879 – 1880 y la tercera la Guerra Necesaria de 1895 que finalizó en 1898. Durante  la lucha alcanzó el grado de General de Brigada del Ejército Libertador cubano.

Además fue un notable médico, profesor y científico cubano. Se especializó en el campo de la Obstetricia y la Ginecología. Como hombre de ciencias obtuvo notables reconocimientos y dejó una apreciable obra escrita en el terreno de las ramas de la medicina.

1958. Fallece en La Habana Luis Díaz Soto.

Nació en el poblado de Pedro Betancourt, en la provincia de Matanzas, el 13 de febrero de 1905. Desde muy joven se interesó por los libros y temas cubanos y, por los autores que recogían datos relativos al pasado histórico de Cuba. Visitaba periódicamente las librerías y gustaba de viejas ediciones que atesoran datos poco conocidos.

Se graduó en la Universidad de La Habana en la Facultad de Medicina. Fue alumno interno del Hospital Calixto García y de la Clínica Fortún Souza.

Después de graduado al fundarse en 1932 el Instituto Clínico de La Habana, fue médico interno, de visita nocturna domiciliaria, especialista en vías digestivas, y laboró en varios departamentos: metabolismo, drenajes, laboratorio y Rayos X. Estuvo al cargo de la organización del Departamento de Farmacia de la Institución desde la parte administrativa y técnica.

Ejerció como médico de los Servicios Municipales de La Habana (Casa de Socorro), desde diciembre de 1933 hasta marzo de 1935. Se vinculó a las luchas del sector de la medicina en Cuba, iniciadas en los años treinta. Participó en la organización de la Federación Médica de Cuba.

En junio de 1937 formó parte del grupo de combatientes cubanos que participó en la guerra civil del pueblo español en defensa de la República.

Al regresar de España se incorpora de nuevo a las actividades del Partido Comunista y al constituirse el Partido Unión Revolucionaria Comunista, es nombrado miembro del Comité Ejecutivo, y por el mismo partido, candidato a Delegado a la Asamblea Constituyente.

Asumió la dirección del Centro Benéfico de Trabajadores de Cuba en 1940.

Gravemente enfermo, los últimos años de vida los vivió bajo la presión policíaca en una semiclandestinidad, siempre pendiente de los acontecimientos y con muchos deseos de lograr el triunfo revolucionario.

Se propuso escribir la Historia de la Medicina en Cuba, para cuyo fin logró acopiar gran cantidad de datos. Las responsabilidades políticas y profesionales no le permitieron realizar este propósito.

2017. Fallece en La Habana Rolando Núñez.

Comenzó su quehacer en el arte como artista aficionado en las Fuerzas Armadas Revolucionarias.

Años después en su trabajo profesional se destacó tanto en el teatro, el cine y la televisión de Cuba. Formó parte del elenco del Grupo de

Teatro Político Bertolt Brecht. En el cine tuvo participación en diversas películas, entre otras, Plaff, Mujer trasparente y Rosa la china. En la televisión estuvo presente en las telenovelas Pasión y Prejuicio, Tierra Brava y Polvo en el Viento.

También es recordado su personaje de Botaperro en el serial Su propia guerra, que afianzó su aceptación por el público cubano.

Se desempeñó además como Presidente de la Asociación de Artistas Escénicos de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).

Su nacimiento tuvo lugar en La Habana el 4 de diciembre de 1950.