
La épica batalla de Cuba contra el bloqueo económico de los Estados Unidos
Más allá de haber tenido que enfrentar desde la etapa inicial de la Revolución campañas difamatorias, amenazas, acciones militares, maniobras diplomáticas, Cuba a través de varios decenios se ha visto sometida a un sistemático bloqueo económico de los Estados Unidos.
Las medidas adoptadas por el Gobierno Revolucionario de Cuba destinadas a recuperar las riquezas del país y a ponerlas al servicio del pueblo afectaron los intereses de los grandes monopolios norteamericanos que durante mucho tiempo habían saqueado y controlado los recursos de la nación.
Ante las diferentes medidas y leyes que se fueron aprobando en Cuba a partir de 1959 los Estados Unidos reaccionaron con un bloqueo (que ellos llaman embargo) que ha causado múltiples afectaciones al país y sobre todo ha repercutido en el bienestar del pueblo.
Ya desde fecha tan temprana como el 6 de febrero de 1959 en un informe del Banco Nacional de Cuba se detalló que en los bancos estadounidenses se habían efectuado depósitos por varios centenares de millones de dólares, robados por los cabecillas batistianos que se lograron fugar del país. Ese dinero no fue incautado ni devuelto a Cuba.
Unos días después, el 12 de febrero el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos denegó un modesto crédito solicitado por el Banco Nacional de Cuba para sostener la moneda cubana.
El 24 de junio de 1959 el Departamento de Estado norteamericano convocó a una reunión para orientar que correspondía al Gobierno de Estados Unidos asumir de inmediato una posición muy firme contra la Ley de Reforma Agraria y su consecuente implementación.
El 17 de mayo el Gobierno Revolucionario Cubano había aprobado dicha ley que daría inicio al vasto proceso transformador que se realizaría en las zonas rurales del país.
Ya desde esa etapa los Estados Unidos comienzan a valorar la supresión de la cuota azucarera cubana. Incluso en abril del año siguiente en un informe del Departamento de Estado norteamericano se tenía en cuenta que la mayoría de los cubanos apoyaban a la Revolución encabezada por Fidel Castro y que era necesario enajenar ese apoyo interno del pueblo a través del descontento y el desaliento basados en la insatisfacción y las dificultades económicas.
En abril de 1960 varias transnacionales estadounidenses, a petición del Gobierno de Estados Unidos, restringen la exportación de combustible a Cuba.
En junio de 1960 el presidente Dwight Eisenhower decretó la reducción de 700 mil toneladas de la cuota azucarera cubana en el mercado norteamericano y el 24 de septiembre el Gobierno de Estados Unidos notificó la suspensión de operaciones de la planta de níquel de Ñícaro, propiedad del gobierno de ese país.
El 19 de octubre de 1960 se pusieron en vigor medidas generales prohibiendo exportaciones norteamericanas a Cuba.
El 16 de diciembre el presidente Eisenhower suprimió totalmente la cuota azucarera cubana para los primeros tres meses de 1961 y el 3 de enero se produjo el rompimiento de relaciones diplomáticas de Estados Unidos con Cuba.
El 31 de marzo de 1961 el presidente John F. Kennedy suprimió totalmente la cuota azucarera cubana en mercado norteamericano para el año 1961.
Y unido a ello en el siguiente mes se produjo la llegada a Cuba de la invasión mercenaria (Playa Girón) que pretendía destruir por medio de la fuerza a la Revolución.
En enero de 1962 Estados Unidos desarrolló una gran maniobra en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA) para condenar a Cuba y propiciar su aislamiento con la ruptura diplomática con nuestro país de la mayoría de los países latinoamericanos.
A su vez la guerra económica no cesó. En febrero de l962 por parte de los Estados Unidos se puso en vigor lo que eufemísticamente identificaron como embargo, que en realidad ha sido un bloqueo férreo y genocida.
En el transcurso del tiempo se fueron aprobando otras medidas y leyes que reforzaron ese bloqueo que se ha mantenido a través del tiempo.
Desde 1992, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha aprobado con creciente mayoría la Resolución planteada por Cuba que plantea la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América.
Como consecuencia de ese bloqueo, unido a la crisis económica internacional, y otras cuestiones como las afectaciones causadas por epidemias y fenómenos atmosféricos, y problemas internos de carácter subjetivo que se encaran con firmeza, Cuba enfrenta en la actualidad una situación compleja en el campo de la economía.
Pero al igual que ha ocurrido en el transcurso de más de seis decenios la Revolución con la fuerza del pueblo sigue batallando y se encara con determinación a las limitaciones actuales sin doblegarse a los dictados del imperio y sus seguidores.
Y como parte de esa batalla también en esta oportunidad Cuba lleva el tema de poner fin al criminal bloqueo de Estados Unidos al seno de la Organización de Naciones Unidas en este período de sesiones.
Hace tan sólo unos días Bruno Rodríguez Parrilla, Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, en su perfil en la red social X, denunció que Estados Unidos ignora los llamados de la comunidad internacional a eliminar, sin condicionamientos, esa política unilateral, extraterritorial y genocida, al tiempo que reafirmó el derecho de nuestro país a vivir sin ese cerco.
El Canciller cubano también expuso que desde 2019 Estados Unidos ha escalado esas medidas coercitivas unilaterales a una dimensión extrema que priva a Cuba de los ingresos indispensables para adquirir alimentos, combustibles, materias primas y equipamientos, y provoca carencias, dificultades y ansiedad a las familias.
“Es –aseguró - una violación, masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos. A precios corrientes, los daños acumulados del bloqueo estadounidense ascienden a 159 mil 084 millones de dólares, y el último año alcanzan los cuatro mil 867, es decir, 405 millones mensuales.
Señaló que la permanencia de Cuba en la arbitraria y espuria lista de estados patrocinadores del terrorismo agrava esta situación.
“Una vez más el gobierno de Estados Unidos, en su política unilateral, extraterritorial y genocida quedará aislado ante el reclamo unánime de la comunidad internacional de que Cuba tiene derecho a vivir sin bloqueo”, significó el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba
“La Revolución se hace cada vez más invencible en la misma medida en que tenga un pueblo más despierto, más firme y más consciente. De esa manera se estrellarán contra la Revolución todas las maniobras del imperialismo; el bloqueo económico con todas sus consecuencias, la agresión económica con todas sus consecuencias, podrían hacer mella en un pueblo desorganizado, vacilante, podrían hacer mella en una revolución que no tomara las medidas necesarias y que se requieran para hacer frente a la agresión imperialista; porque se lucha contra un factor poderoso, pero el cual nosotros podremos vencer perfectamente bien”.
“El bloqueo es algo más que prohibir la venta de mercancías de Estados Unidos, impedir comprar o vender en Estados Unidos, es una feroz presión y una feroz persecución para evitar que nosotros hagamos operaciones comerciales de ningún tipo, y todo ese poderío inmenso está concentrado hoy contra nuestro país”.
Discurso pronunciado en el encuentro con los Pastores por la Paz, 27 de noviembre de 1992
“La economía forma parte esencial de la Revolución, y la economía ha sido uno de los frentes donde el enemigo ha tratado de golpearnos y de aplastarnos; la economía fue el frente donde trató el imperialismo con su bloqueo de hundirnos, de hundir la Revolución; la economía es un importantísimo frente de la Revolución y uno de los frentes que más ha recibido los ataques del enemigo”.