1799.  Nace en La Habana Felipe Poey y Aloy

En su quehacer profesional se destacó como investigador en Ciencias Naturales, sobre todo por sus estudios en la Ictiología.  A la preparación de su obra más trascendental Ictiología Cubana, dedicó muchos años de su vida. Esta obra exquisitamente ilustrada y presentada en manuscrito en la Exposición Internacional de Ámsterdam, le valió la condecoración, reservada a grandes talentos, de la Cruz de Caballero del León  Neerlandés y diplomas de reconocimiento de sociedades científicas de Londres, Filadelfia, y Nueva York.

En 1861, al constituirse en La Habana la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales, primera de su tipo en todo el continente americano, estuvo entre sus miembros fundadores. Algún tiempo después en 1877, se fundó la Sociedad Antropológica y fue  su primer presidente. Fue también Socio de Mérito de la Sociedad Económica de Amigos del País.

Su racionalismo científico no limitó su exquisita sensibilidad artística y literaria, que lo llevó a escribir versos, artículos, críticas, cuentos y otras narraciones.

Falleció en La Habana el 28 de enero de 1891.

1990. Fallece en La Habana Mariano Rodríguez Álvarez.

Estuvo entre los fundadores de la escuela de pintura de La Habana. Laboró de forma constante en encontrar una nueva manera de expresión  para mostrar una  escuela con un estilo cubano.

Creó una obra diversa y abarcadora, universal pero con una línea nacional. Fue catalogado como el pintor de los gallos, temática por la cual fue conocido internacionalmente desde los años iniciales de la década del cuarenta. La imagen del gallo ejerció una gran influencia en él  y acerca de esto señaló: “Cuando estoy en un proceso de cambio en lo que a línea de creación se refiere, pinto un gallo. Si sale bien, el cambio es positivo, y si no, no es favorable.”

Sobre cómo concebía y trabajaba sus obras afirmó en una oportunidad: “Muy fácil, cuando me viene cierta idea a la mente, empiezo a trabajar. Si no tengo ganas de pintar, hago algunos dibujos, una mano, una nariz, un gallo, para mantenerme en forma. Dibujo diariamente, al levantarme o cuando me siento a descansar en mi sillón favorito.”

Pintó hasta casi los últimos instantes de su vida. Su infatigable amor por lo que realizaba, su trabajo arduo, su talento excepcional, han permitido recibir a las nuevas generaciones  como legado su colección de óleos, pasteles y dibujos que quedan como patrimonio cultural del país.

También desempeñó las funciones de vicepresidente y después Presidente de la Casa de las Américas.

Nació en la zona de Marianao, La Habana,  el 24 de agosto de 1912.

1913.  Se funda la Sociedad Cubana de Historia Natural Felipe Poey.

Se creó por iniciativa de su discípulo predilecto, el científico Carlos de la Torre. Durante 48 años agrupó a los naturalistas del país y propició la presentación de trabajos y la celebración de debates acerca de mineralogía, geología, botánica, zoología, antropología, paleontología, agronomía y sus aplicaciones. Son muy importantes sus Memorias, que se publicaron entre 1915 y 1961. Dejó de existir en este último año. Entonces sus obras e investigaciones pasaron al Museo de Historia Natural Felipe Poey creado por la Academia de Ciencias de Cuba. Su importante biblioteca se trasladó más tarde al Instituto de Biología de la propia Academia de Ciencias.

1964. Es  Inaugurado en La Habana el Museo Nacional de Historia Natural Felipe Poey.

Es una institución científica, cultural, especializada en la historia natural que tiene colecciones de estos perfiles, las estudia, y socializa principalmente a través de exhibiciones. El Museo atesora tres conjuntos de objetos considerados componentes del patrimonio cultural de la nación cubana: colecciones taxonómicas, fondos de exhibición y fondos documentarios.