Zoila Castellanos fue una notable compositora que fue conocida desde el punto de vista artístico como Tania Castellanos.

Su nacimiento se produjo en el ultramarino barrio de Regla, en La Habana. el 27 de junio de 1920,

Tania Castellanos tuvo una rica historia. Baste tan sólo mencionar su significativo aporte autoral al movimiento del feeling surgido en nuestro país en la década del cuarenta en el  siglo veinte. Muchas de sus creaciones alcanzaron gran popularidad en Cuba y en el extranjero y resultaron interpretadas por destacados artistas.

Cabe citar a manera de ejemplo las tituladas: Recordaré tu boca, En Nosotros, En mi evocación, Me encontrarás y Cuba, corazón de nuestra América.

También Tania Castellanos tuvo una trayectoria política, incluso durante los años finales de la década del cincuenta tuvo que salir del país y se radicó en México junto a su esposo el prestigioso dirigente sindical Lázaro Peña.

Tras el triunfo de la Revolución pudo retornar a Cuba y de inmediato brindó su aporte decisivo al desarrollo de la música cubana y a la vez participó en la realización de disímiles tareas.

Expresó en sus creaciones bellos sentimientos y aspiraciones para el desarrollo de la vida plena.

Y un ejemplo digno de mencionar fue  la bella y emotiva canción que dedicó a todos los niños del mundo en la que enfatizó el deseo de los infantes de vivir en paz.

Ella igualmente se inspiró en la vida y la obra del Comandante Ernesto Che Guevara, al concebir una creación musical que  tituló Por los Andes del orbe.

Tania Castellanos también  fue fundadora de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, institución que resultó creada en nuestro país en agosto de 1961.

Ella participó de modo muy activo junto a su esposo, el prestigioso dirigente sindical Lázaro Peña en múltiples actividades de carácter político.

Tania Castellanos falleció en La Habana el ocho de diciembre de 1988.

Ya no está físicamente, pero su vida y obra continúan siendo evocadas por muchas personas y particularmente por todos aquellos que aprecian en  sus creaciones un canto a la vida y al amor.

Puede afirmarse con certeza que tanto en Cuba como tal vez en otros lugares del mundo, muchas de sus creaciones musicales han servido y  sirven para que diversas parejas, al cantarlas, se expresen su amor y tejan nuevas ilusiones.

Sigue viviendo en la historia musical cubana y en ese sentimiento que entrelaza a los seres humanos, el amor, que fue en ella fuente de inspiración en su quehacer artístico  en forma constante.