Por Elena Milagros Godinez Dalmau

El consejo popular Pocito Palmar se encuentra en el municipio capitalino Marianao. Actualmente forma parte de uno de los principales objetivos de las autoridades municipales para alcanzar su transformación y la satisfacción de sus pobladores, lo que se logra con esfuerzo, intervención comunitaria, colaboración de todos los vecinos, ganas de hacer y responsabilidad de cumplir, no solo por parte del Estado, sino también de la ciudadanía.

Hoy este barrio transforma varios de sus locales principales como la bodega “El Bodegón”, la panadería “Las Américas” y el Centro Cultural Pocitín. Ya se culminaron las obras del consultorio médico que, precisamente, por estos días da muestras de infinito amor con la aplicación de las vacunas contra la COVID 19 a todos sus pobladores.

Pie de foto: Bodega “El Bodegón”

Pie de foto: Panadería “Las Américas”

Pie de foto: Reparaciones al Centro Cultural “Pocitín”

Pie de foto: Consultorio Médico del Consejo popular Pocito Palmar

Son muchos los que se sienten entusiasmados con estos cambios, mientras otros  esperan a que continúen con rapidez estas transformaciones, pues consideran que no han sido beneficiados aún. La confianza de muchos con los nuevos proyectos denota sus esperanzas por sacar a su barrio adelante. En este sentido algunos también relatan sus historias desde el corazón, pues sienten que han sido escuchados, pero sus problemas han quedado olvidados. Uno de los más críticos es el de la vivienda.

Madres solteras con más de dos hijos, familias donde conviven más de 8 personas, algunas viviendas donde la ayuda debe acudir y otras donde es más que imprescindible el apoyo inmediato.

Pie de foto: Pobladores del sitio conocido como La Escalera conversan sobre su situación con autoridades del Partido y el Gobierno.

Sobre este tema y otras problemáticas que afectan a la comunidad conversaron vecinos y jóvenes de este Consejo Popular con Ernesto Sayas Hernández, Primer Secretario del Comité Municipal del PCC en Marianao; César Manuel Báez García, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular y otras autoridades del territorio. Los habitantes de La Escalera, una zona donde residen familias con más de tres hijos y donde confluyen también personas que viven cerca del río Quibú plantearon sus principales problemáticas y culminaron con la confianza de que existirá la ayuda necesaria para todas las familias y que se atenderán todos los casos, eso sí, con el apoyo  también de todos los que residen aquí.

Vivir también de las alegrías

Los niños de Pocito palmar ya cuentan con una escuela renovada que de acuerdo con Yumisleydis Pérez Ricardo, metodóloga municipal de Marianao, ya hacía falta en el territorio. Ella confiesa que aún faltan detalles por terminar, pero el avance ha sido inmenso. Igualmente el Centro deportivo “Juan Manuel Márquez”, enclavado en la comunidad,  ya se repara con el apoyo de todos los factores y, según su director, Luis Cantero Alfonso, las labores constructivas han sido coordinadas rápidamente para que el centro pueda estar abierto al consejo lo más pronto posible, constituir el esparcimiento de toda la familia y convertirse en un escenario propicio para el conocimiento teórico y práctico de la educación física y el deporte con  el apoyo de las escuelas y del INDER.

Pie de foto: Escuela del barrio Pocito Palmar

Pie de foto: Labores constructivas en el Estadio “Juan Manuel Márquez”

En opinión del delegado de la zona, Reinaldo Romero Pérez, quien ha ejercido este cargo durante más de 24 años el consejo se renueva con todos estos proyectos.  “He visto transformación en estos últimos tiempos, pero aún hay muchos planteamientos que deben cumplirse. La unión de los factores de la comunidad es importante: CDR, FMC, PCC, trabajadores sociales”, explicó.

Pie de foto: Conversación con el delegado de la zona, Reinaldo Romero Pérez.

Por otra parte también señaló que la integración de los jóvenes ha sido muy buena y destacó la existencia de ofertas de trabajo para los jóvenes en las obras que se están remodelando así como en otros sectores de la sociedad. Como anécdota contó que en las labores del consultorio médico que se estaba reparando, hubo una situación de Covid en la brigada y se convocaron 4 muchachos del barrio, de  entre 18 y 19 años quienes fueron los que terminaron  el consultorio.

Cultura y conocimiento para todos

La comunidad se siente contenta además con el trabajo de proyectos comunitarios como Akokan, el cual ha transformado la vida de adolescentes y jóvenes y los ha llevado a un nuevo camino: el de la cultura. El proyecto imparte talleres semanales de diversas temáticas y los vecinos del consejo consideran que eso ha unido a la familia del Pocito Palmar. El apoyo al proyecto también radica en los factores comunitarios, el gobierno y otros proyectos u organizaciones que ven en este una oportunidad para el desarrollo de las potencialidades en los niños, adolescentes y jóvenes.

Pie de Foto: Proyecto Akokan del Consejo popular Pocito Palmar

Por su parte, el Club Martiano de Marianao también realiza sus acciones en este Consejo Popular y llevan el arte y la cultura del pensamiento martiano a niños y jóvenes. Todos se sienten receptivos con las enseñanzas del Apóstol y la vigencia de sus ideas en un escenario tan complejo como el que vivimos hoy.

Pie de foto: Actividad realizada en homenaje al centenario de Cintio Vitier y el aniversario 61 de los CDR, con la participación del Club Martiano de Marianao y el Movimiento Juvenil Martiano de la Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”

Por un barrio mejor por el cual seguir construyendo

Para Gisela Lemos Crespo, trabajadora del transporte lo que se está haciendo en el barrio ha sido efectivo. “Se ha hecho un buen trabajo por la juventud de conjunto con la delegada  Yamila González que ha hecho excelente trabajo  profiláctico en el barrio”, destacó. Ella resalta también que en este barrio es necesaria la respuesta ante la situación de la vivienda, pues hay muchas ciudadelas que están en malas condiciones y donde conviven más de 5 personas en un solo cuarto. “Hasta el momento esta es la situación que tenemos, pero con respecto a la cultura, la vida en la sociedad y los factores de la comunidad, no tengo ninguna queja”, señaló Lemos Crespo.

La respuesta oportuna y en tiempo constituye una de las exigencias de los pobladores de Pocito Palmar, situación que ya se logra cambiar con los intercambios de vecinos con los directivos del municipio. No faltarán las ganas y las expectativas de cada habitante de este barrio por mejorar y dar solución a las problemáticas también con sus propios recursos. El desarrollo local de este consejo es una de las principales prioridades de Marianao, un municipio que da pasos firmes si hablamos de transformación social y que escucha a su gente hoy más que nunca.