En el siglo XIX, en el espacio de unas sesenta hectáreas, en el actual municipio Centro Habana, fue radicándose una emigración procedente de Asia, considerada entre las mayores llegadas al Caribe, la cual brindó un notable aporte al desarrollo y composición de la sociedad cubana.

En 1830, entraron a Cuba chinos procedentes de Filipinas, donde residía una importante población cantonesa que hablaba castellano y se dedicó al servicio doméstico, así como a la horticultura y a la floristería.

Uno de los factores más importantes en la formación de la comunidad en el Barrio Chino de La Habana, lo constituyó la creación de sociedades alrededor de las cuales fueron aglutinándose los troncos familiares y sus descendientes.

Además del colorido que brindaron los pequeños negocios enraizados en el laberinto de calles estrechísimas, resaltaba la labor de animación de las instituciones organizadas según el lugar de procedencia.

Dicho barrio nació en 1858, pero su crecimiento fue tan acelerado que se convirtió en su época en el más grande y famoso de América, después del de San Francisco en Estados Unidos.

Esta comunidad china en La Habana se hallaba enclavada en la zona comprendida entre las calles de Campanario a Rayo y de Salud a Zanja.

Esta barriada cuenta en la actualidad con varias instituciones que agrupan a los chinos residentes en Cuba y sus descendientes.

MUNICIPIO CENTRO HABANA

El municipio Centro Habana atendiendo a su superficie ya que abarca un área de tres coma 42 kilómetros cuadrados es el más pequeño de los 168 que existen en Cuba. Es a su vez uno de los más densamente poblados ya que cuenta con más de 150 mil habitantes.

Los asentamientos poblacionales del hoy municipio Centro Habana datan de los primeros años de la época colonial en Cuba. Están estrechamente vinculados a la fundación de la Villa de San Cristóbal de La Habana en el siglo XVI.