La Habana tiene, como consecuencia de la sequía, un déficit de agua para el abasto a la población y la economía de 969 litros por segundo, con mayor afectación en el Oeste de la ciudad.

En su geografía, al cierre del primer trimestre, llovió menos de un 20 por ciento de la media histórica; situación que ha provocado notable disminución de los niveles de llenado en los principales acuíferos que le abastecen.

Para paliar el negativo impacto del fenómeno climático, se ejecuta un programa de inversiones que, entre sus obras, prioriza la hidrometría; incentivo para el ahorro del recurso natural.

La interconexión de un sistema para trasvasar 300 litros de agua por segundo de Cueca Sur, suministradora del centro de la ciudad, a Ariguanabo, en el Oeste, destaca entre las inversiones más importantes.

Con ese fin se construyen una estación de bombeo y punto de cloración; también para ese sistema, una conductora de 800 milímetros (con un nivel ya garantizado) de fabricación nacional, cuyo trazado se extenderá por 5.4 kilómetros, precisó Manuel Paneque, delegado provincial de Recursos Hidráulicos.

Asimismo se trabaja, dijo, en un conducto desde zona alta de Ariguanabo hasta Punta Brava, en el municipio de La Lisa, de 6.30 kilómetros; de los cuales 1.2 ya están construidos.

Rehabilitan, igualmente, tres conductoras importantes del sistema de abasto del oeste habanero y se lleva a cabo la macro medición y la instalación de metro-contadores en todos los pozos de Ariguanabo.

Del mismo modo, en esa zona se prioriza el montaje de los dispositivos contadores del programa de este año para cerrar sectores hidráulicos. De cinco mil unidades a instalar, señaló Paneque, ya se han colocado dos mil 453.

Fuente: Radio Enciclopedia