El antiguo Palacio de los Capitanes Generales constituye una gran edificación que se localiza en la Plaza de Armas en el centro histórico urbano de la capital cubana. Este Palacio se levantó en el área donde inicialmente estuvo la Parroquial Mayor en la villa de San Cristóbal de La Habana. Se construyó en el período comprendido entre 1776 y 1791. Las obras  resultaron dirigidas por el coronel de ingenieros Antonio Fernández Trevejos y Zaldívar.

El primer máximo representante de la metrópoli española en Cuba que fijó allí su residencia fue Luis de Las Casas en 1791 aún sin haberse concluido totalmente la construcción del Palacio.  La singular Casa de Gobierno acogió la Capitanía General, el cabildo y la cárcel. Varios decenios después el Capitán General Miguel Tacón consideró inapropiado que en dicho edificio también estuviesen presos comunes. Entonces los reos  fueron trasladados hacia otro lugar y el Palacio fue sometido a algunos trabajos de readecuación.

Esta edificación cuenta con un gran patio en cuyo centro se halla una estatua de Cristóbal Colón, navegante que llegó a tierras de América el 12 de octubre de 1492 y al territorio cubano en específico el 27 de ese mes y año. En ese momento Colón sólo apreció una parte de la zona oriental de Cuba. Dos años después volvió a recorrer los mares que bordean al territorio cubano, aunque no llegó a darle por completo la vuelta a Cuba, ni tampoco llegó a la zona donde desde hace casi cinco centurias se asienta La Habana. La estatua de Cristóbal Colón está flanqueada  por dos altas palmas reales y una sinuosa yagruma de elevada copa. La estatua, que refleja el gran Almirante en traje de la época, es de mármol y se halla sobre un pedestal del mismo material.

Desde 1854 el Ayuntamiento habanero había acordado situar un monumento a Colón en este sitio, pero no es hasta seis años después que fue traída de Italia la estatua y en 1862 fue situada donde en la actualidad se puede apreciar. Entre 1899 y 1902 el Palacio de los Capitanes Generales fue sede del Gobierno Interventor norteamericano y después entre el 20 de mayo de 1902 hasta 1920 fue Palacio Presidencial. Con posterioridad resultó ser sede de la Alcaldía y Oficina del municipio de La Habana. Desde 1938 tuvo su sede en el edificio la Oficina del Historiador de la Ciudad bajo la dirección del doctor Emilio Roig de Leuchsenring.

En 1967 el gobierno municipal de La Habana se trasladó a una nueva sede, para que el edificio comenzara a restaurarse con la finalidad de destinarlo a Museo de la Ciudad de La Habana, cuyas primeras salas de exposición se inauguraron a partir de 1968. El Museo cuenta en la actualidad, no sólo en esta edificación sino también en otros locales ubicados en el centro histórico urbano de la capital cubana, con decenas de salas, una de las cuales refleja el despacho del doctor Emilio Roig Leuchsenring.  Conserva y expone piezas que pertenecen a la colección personal del gran historiador  cuya existencia se desarrolló entre 1889 y 1964. Él además fue el fundador del primer Museo de la Ciudad de La Habana, que creó en el año 1942 y que estuvo ubicado en el Palacio de Lombillo en la Plaza de la Catedral.