A través del tiempo diversos compositores cubanos se han inspirado y han dedicado obras a reflejar aspectos y lugares de nuestro país.

Hay  por ejemplo creaciones musicales que destacan el simbolismo y características de ciudades y poblados, así como de otros sitios específicos del archipiélago cubano.

El compositor, violinista y director de orquesta Enrique Jorrín, creador del género musical identificado como Cha Cha Cha, tiene dos obras que hacen referencia a nuestra capital.

Precisamente la creación musical de Jorrín titulada La Engañadora guarda relación con un lugar de La Habana, la intersección de las calles Prado y Neptuno, que se localiza  en uno de los laterales del Parque José Martí, y también está cerca de edificaciones significativas como el Gran Teatro “Alicia Alonso”, los hoteles Golden Tulip Parque Central, Manzana y Plaza, respectivamente,  y el Capitolio Nacional.

En dicha obra se narra la supuesta historia de una joven que solía rellenar su cuerpo con pequeñas almohadillas para tratar de llamar la atención de los hombres.

De eso se deriva el título de la creación, La  engañadora.

Jorrín precisó que fue pura ficción y que cuando su querida madre escuchó la composición se la censuró, pero sus músicos se fascinaron y lograron convencerla de que seguramente sería un gran éxito.

Y ellos tuvieron razón, pues La Engañadora alcanzó una gran popularidad tanto en Cuba como en el extranjero.

Varios años después de haber creado en la etapa inicial de los años cincuenta La Engañadora, Jorrín se inspiró en el Túnel de La Habana, que fuera inaugurado en mayo de 1958.

El Túnel de La Habana constituyó la obra más ambiciosa de ingeniería que se construiría en la capital, y en Cuba, hasta esa fecha.

El túnel cuenta con una longitud de 733 metros bajo el nivel del mar y un ancho de 22 metros. 

Tiene una capacidad de circulación de alrededor de 1 500 vehículos por hora en cada una de sus dos vías.  Cuenta con 4 sendas, dos en cada sentido del tránsito.

Existen muchas más obras de compositores cubanos que hacen alusión a La Habana.

Por ejemplo están las siguientes: la que fuera popularizada por el cuarteto Los Zafiros que tiene por título Hermosa Habana, compuesta por Rolando Vergara, Andar La Habana de Ireno García, Hoy mi habana, debido a la inspiración de José Antonio Quesada e interpretada inicialmente por Xiomara Laugart,  Sábanas blancas de Gerardo Alfonso, Habáname de Carlos Varela, La Habana sí de Juan Formel, y Habanization, de Raúl Paz. Incluso el destacado canta autor argentino Fito Páez se inspiró en la capital cubana y creó una obra titulada Habana.

Hay otros compositores que se sumaron a la lista de los que con sus obras musicales le rinden homenaje a la capital de todos los cubanos cuyo centro histórico urbano además de Monumento Nacional ostenta la condición de Patrimonio Cultural de la Humanidad.