HOTELES EN ANTIGUAS EDIFICACIONES EN LA HABANA VIEJA
Con su medio milenio de existencia, festejado en noviembre del 2019, La Habana, y de manera muy especial su centro histórico urbano, resulta de gran interés por una gran cantidad de los turistas que anualmente visitan nuestro país.
Teniendo en cuenta ello en la capital cubana se han construido y también se edifican en estos momentos una cantidad de hoteles, entre ellos varios en antiguos palacios que datan de siglos anteriores al presente.
Por supuesto a esas edificaciones se les ha estado realizando su correspondiente remodelación y adecuación, pero siempre respetando sus valores patrimoniales.
Hago referencia en esta ocasión a tres de esas edificaciones existentes en La Habana Vieja que se convirtieron en hoteles significativos.
El Palacio del Marqués de Monte Hermoso es una de las joyas arquitectónicas de La Habana Vieja. Allí radica un lujoso hotel de 5 estrellas plus. Se localiza en la calle Oficios 110 junto a la Plaza de San Francisco de Asís. Tiene 21 habitaciones, incluyendo una Suite Colonial más una Sala Presidencial, un Lobby Bar, un patio interior y galerías de arte.
En la edificación se muestran algunos valores patrimoniales del siglo XIX tales como la fachada neoclásica.
En su etapa inicial esta edificación tuvo como objetivo su utilización como vivienda pero la planta baja se destinó a almacenes de la Aduana.
A principios del siglo XX se le añadió la última planta.
Justo frente a la Plaza de San Francisco de Asís, en La Habana Vieja, también se encuentra una edificación que antaño sirvió de oficinas y que ahora está siendo adaptado para que funcione allí el hotel Palacio de los Corredores.
Ese nombre guarda relación con el hecho que ese inmueble sirvió de sede desde 1953, a los corredores de Aduana. Ese edificio es de estilo ecléctico.
El hotel Palacio de los Corredores, con categoría de cinco estrellas, cuenta con siete pisos y 56 habitaciones.
El interior de la edificación presenta muy buenas condiciones estructurales al contar con columnas, vigas y cierre de albañilería de ladrillo.
El patio también forma parte de los valores patrimoniales de la edificación.
Uno de los clásicos edificios de estilo art nouveau en La Habana Vieja es el Palacio Cueto que se halla ubicado en la esquina de las calles Muralla e Inquisidor.
La edificación fue diseñada en 1908 por el arquitecto Arturo Marqués, con un llamativo trabajo en piedra esculpida, vistosos balcones en forma de olas y elaborada ornamentación en su fachada.
Este palacio acogió una fábrica de ropas y una farmacia, hasta que en los años de la década del veinte, en la pasada centuria, José Cueto, al alquilarla, la convirtió en el entonces hotel Palacio Viena.
La edificación se dividía en un piso de alojamiento en las plantas superiores y comercio en la baja. Después la edificación tuvo distintos usos y sufrió un gran deterioro.
Cuando se decide lograr su remodelación para incorporarlo al sistema hotelero, la estructura interior de la edificación estaba muy dañada y entonces fue demolida.
Una vez reinaugurado, el año pasado, el edificio retomó su uso original y el hotel cuenta con 57 habitaciones y ostenta la categoría de cinco estrellas.