Sede de varios congresos del Partido Comunista de Cuba, de la mayoría de las reuniones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, de eventos nacionales y de carácter internacional de gran relevancia, así como otras actividades políticas y culturales, se localiza en La Habana el Palacio de Convenciones.

Su construcción se inició en agosto de 1977 y dos años más tarde entró en funcionamiento, exactamente  el 28 de agosto de 1979, con la reunión a nivel de expertos que antecedió a la reunión de cancilleres y la sexta conferencia cumbre del Movimiento de Países No Alineados.

La obra se ejecutó a un costo de 28 millones de pesos. Su proyectista principal fue el arquitecto cubano Antonio Quintana.

El Palacio es un edificio de líneas horizontales. Mantiene una integración al paisaje circundante.

Los escalones que conducen del vestíbulo principal al restaurante El Bucán parecen como si estuvieran flotando sobre multitud de finísimos hilillos de agua que fluyen de un surtidor colocado en el pedestal de la escalera.

El Palacio de Convenciones se encuentra en la calle 146 entre 11 y 13 en el reparto Siboney, en La Habana, a unos 8 kilómetros del centro de la capital cubana.  Está justamente a orillas del río Quibú.

Abarca un área de 60 mil metros cuadrados. Es un excelente sitio para realizar eventos de diverso tipo.

El Palacio dispone de un salón plenario principal con capacidad para alrededor de 1500 personas.

Dentro del salón no se pierde contacto con el exterior gracias a gigantescos ventanales de cristal que dan la impresión de que la exuberante vegetación penetra en el recinto.

Cuenta también con 11 salas con capacidades para acoger desde 70 hasta 400 personas.

En la decoración del Palacio hay una gigantesca celosía, inspirada en los techos moriscos cubanos de los siglos XVII y XVIII.

También hay un gran mural de setenta metros de largo hecho con ladrillos de distintos tipos cóncavos y convexos que forman círculos de gran belleza.

En los demás salones existentes también se repite el detalle de los ventanales al exterior, mediante los cuales se puede apreciar el colorido de la vegetación tropical.

En el Palacio existen además salones para el trabajo de la prensa con los servicios de comunicación necesarios.

El Palacio cuenta con posibilidades técnicas de realizar traducciones simultáneas por seis canales. También en varios salones se pueden realizar proyecciones cinematográficas en 16 y 35 milímetros.

En varias áreas del Palacio de Convenciones pueden apreciarse murales revestidos en pieles y piedras.

En el exterior como parte de la vegetación existente se encuentra la mariposa, la flor nacional.

El ingeniero Ramón Rodríguez Pla fue el proyectista general de las obras exteriores entre las que se encuentran los tres puentes sobre el río Quibú, los que suman en total 110 metros.

El Palacio tiene excelentes restaurantes como El Bucán, así como fuera de la edificación se hallan El Rancho y el Palenque.

Interrelacionado con el Palacio se encuentra el hotel Palco.