El científico cubano Esteban Pichardo Tapia, fue considerado el más destacado geógrafo de Cuba en el siglo XIX. Él falleció en La Habana, el 26 de agosto de 1879.

Su nacimiento tuvo lugar en Santiago de los Caballeros, Santo Domingo, el 26 de diciembre de 1799, pero cuando sólo contaba con 2 años, su familia se radica en Cuba, en la localidad de Santa María de Puerto Príncipe, hoy Camagüey, donde cursa los primeros estudios.

Con posterioridad, se traslada para La Habana como alumno del Seminario de San Carlos y San Ambrosio, del que se gradúa de abogado en el año 1822. Los inicios de la década del 20 marcan para Esteban Pichardo sus primeras diferencias políticas con el gobierno colonial español, lo que limita su relación con este sólo en el campo científico.

En ese tiempo, Pichardo realiza un periplo por Puerto Rico, Estados Unidos, y Europa, donde fue encarcelado a su paso por la metrópoli española, en 1825. Con posterioridad logra evadirse y, después, fue declarado inocente.

Al regresar a Cuba, se radica indistintamente en varias ciudades como La Habana, Matanzas, Camagüey y Santa Clara.

Fue entonces que incursiona en la literatura, al escribir un tomo de poesías y el Diccionario Casi razonado de Voces Cubanas, publicado en 1836, que tuvo varias ediciones, la tercera en el año 1862.

Además, resumió pasajes de su agitada vida en la novela costumbrista El Fatalista, creada en 1865.

La principal obra geográfica escrita por él fue la titulada Itinerario General de la Isla de Cuba, que culmina después de una expedición por la región central y puntos importantes de la zona oriental del país, donde recopila datos topográficos descriptivos y estadísticos que fueron enriquecidos a medida que le incorpora los análisis hechos de sus viajes por Camagüey y la región occidental, resumidos en Camino de la Isla de Cuba.

En 1829, ya Pichardo había entregado el Compendio de Geografía de la Isla de Cuba para colegios y escuelas secundarias, concluidos en 4 tomos, entre 1854 y 1855.

La cartografía realizada por Esteban Pichardo comenzó por el estudio de los terrenos, completados por los planos topográficos realizados por los agrimensores, así como otros datos provenientes de comisiones oficiales e investigadores particulares en la Carta Topográfica de Matanzas y su Jurisdicción Real Ordinaria con la Vecindad de su Circunferencia, que expone en la Biblioteca Pública de la Sociedad Económica de Amigos del País. Elabora además un mapa general de Cuba a escala menor y emprende, en 1840, otro sobre Matanzas y la región occidental en cuatro hojas, que vio la luz en 1853.

Por esa fecha comienza su gran mapa de Cuba, que concluye en 1874.

Desde 1865, por disposición oficial, había cesado en el cargo de archivero de la Dirección de Obras Públicas. Abandonado por sus contemporáneos, junto con su familia, cae en una difícil situación económica.

Muere a los 79 años, ciego y pobre.