El nombre Marianao proviene de la voz indígena Mayanabo, que significa algo así como tierra entre dos ríos, estando esta localidad circundado al este por el río Almendares y al oeste por el río Quibú. Este prefijo maya es muy frecuente en los nombres dados por los aborígenes a muchos lugares y ríos de Cuba, lo que ha permitido la ascendencia maya de algunos grupos indígenas cubanos. Bachiller y Morales, en su libro Cuba primitiva, publicado en 1838, defiende esta versión que es, en definitiva, la verdadera, y comenta, desvirtuándola, la versión popular que atribuye el nombre a la existencia de una mujer nombrada María, apellidada Nao que guardaba relación con una perdida Nao (nave) o a la existencia de una hacienda cuya propietaria portuguesa o brasileña, respondía al nombre de Maria-Nao. Estas son leyendas que algunos aún comentan, pero sin ninguna base real. Mayanabo era uno de aquellos asientos de población indígena fomentados a orillas del mar y de los ríos. Marianao es en la actualidad un municipio que atesora una rica historia marcada por relevantes acontecimientos culturales, políticos, sociales y económicos que dieron origen a los barrios que hoy la integran y a las tradiciones que la caracterizan. Conocida también como ciudad jardín por aquellos que aman las bondades de su naturaleza, Marianao se distingue de otros municipios de la capital por la abundante presencia de vegetación en toda su área.