El 27 de diciembre de 2004 falleció en La Habana Alfredo Juan González Rostgaard, relevante diseñador gráfico, dibujante, pintor y profesor cubano, a quien, por sus grandes valores artísticos y la efectividad comunicativa de sus obras, el Centro de Diseño de la Universidad de Quebec, en Montreal, Canadá, lo consideró como uno de los sietes grandes del diseño del cartel cubano de la Revolución.

Nacido el 31 de diciembre de 1947 en la ciudad de Guantánamo, en el oriente cubano, Rostgaard cursó estudios de dibujo en la Escuela Provincial de Artes Plásticas José Joaquín Tejada, en Santiago de Cuba. Después de graduado, él se sintió atraído por el mundo de la publicidad y, tras el triunfo de la Revolución en Cuba, en 1959, trabajó como diseñador de propaganda y con el paso del tiempo, sobresalió por la elaboración de carteles de contenido social, cultural y político.

Alfredo Rostgaard, reflejó en sus carteles un estilo muy personal, con un marcado código expresivo, en el que se aprecian grandes influencias de la llamada vanguardia plástica cubana, surgida en las décadas de los años 20 y 30 del pasado siglo. Creador multifacético, entre los años 1965 y 1970 formó parte de los diseñadores gráficos del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos, ICAIC, entidad para la cual elaboró más de 200 carteles.Por aquel entonces también asumió la dirección artística de la Revista Tricontinental y el diseño de los carteles para la Organización de Solidaridad de los Pueblos de Asia, África y América Latina, OSPAAAL.  

Se distinguió por el diseño de carteles para las presentaciones de estrenos de películas en los cines cubanos. La más famosa de las obras creada por Rostgaard fue el cartel titulado “La rosa y la espina”, diseñado para el Primer Encuentro Internacional de la Canción Protesta, organizado por la Casa de las Américas, en 1967. 

Con el paso del tiempo, aquel cartel se convirtió en una especie de símbolo de la nueva canción cubana y fue seleccionado, además, para servir como portada al libro “The art of revolution”, del ilustrador y director de arte norteamericano Dugald Stermer, primer texto en el que se difundieron, a nivel internacional, los logros de la cartelística cubana tras el triunfo popular de 1959.

Como diseñador, Rostgaard igualmente participó en disímiles exposiciones personales y colectivas tanto en Cuba como en países de Europa, Asia y América.  Por la relevancia de sus obras, Alfredo Rostgaard obtuvo varios premios y reconocimientos, tales como la medalla de oro en la categoría de Diseño en Comunicación Visual, en la Tercera Bienal de Artes Gráficas, celebrada en Cali, Colombia, la Distinción por la Cultura Nacional, en 1981, y el Premio Nacional de Diseño “Muñoz Bach”, de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, en el 2004. Además de diseñador gráfico, dibujante, pintor Alfredo Juan González Rostgaard fue profesor.