Poder y pueblo son la misma cosa en Cuba.
Hoy inicia en todo el país la rendición de cuenta del delegado a sus electores, proceso medular del Poder Popular y que se extenderá hasta el próximo 15 de noviembre. Serán días de participación activa y directa de la ciudadanía, un postulado de los principios de la democracia socialista a la que hemos llegado tras años de búsqueda constante del empoderamiento del pueblo y su protagonismo en la gestión del Estado y el Gobierno.
Más de 65 000 reuniones en las que los delegados explicarán sobre su gestión y se nutrirán de la sabia popular se realizarán en Cuba en los días venideros. Este proceso se hace un momento complejo, donde las dificultades derivadas del recrudecimiento del bloqueo y los efectos de la última pandemia minan la cotidianidad.
Por eso este ejercicio será crucial para seguir encontrando soluciones entre todos y con la participación de los integrantes de la comunidad, esa en la que confluyen obreros, campesinos, intelectuales, amas de casas, en fin, en la que está representado todo el pueblo y que es un eslabón fundamental en la defensa de la Revolución y el Socialismo.
Este proceso de verdadero poder popular es ideal, además, para reconocer a quienes en el barrio se empeñan en la construcción del bienestar colectivo y para que autoridades administrativas del territorio, en su condición de servidores públicos, dialoguen y conozcan de primera mano las inquietudes de los electores, esas que día tras día tramita el delgado y trabaja para que encuentren soluciones aunado voluntades en momentos de marcada estreches económica y de recursos.
Hoy arranca un espacio para reflexionar sobre el cúmulo de potencialidades que existen en cada circunscripción para hacer frente a la desafiante situación. Pero también para reafirmar que no existen obstáculos infranqueables y que como expresó el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez “estos años, y cada hora preñada de combate, han acrecentado en el pueblo cubano capacidades muchas veces demostradas -y otras todavía insospechadas- para enfrentar múltiples embates, carencias, provocaciones y desafíos.
Varios son los delegados que por primera vez darán la cara y mirarán a los ojos de sus electores como solo puede hacerlo quien se desvela por el problema de otros y dedica un gran número de horas a gestionar su solución. Por eso en días previos se desarrolló un proceso de capacitación que, a decir del presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo Hernández en declaraciones al diario Granma, dotó a los representantes populares de las herramientas necesarias que le permitan enfrentar con éxito este proceso.
En estos días se reafirma el postulado del Comandante en Jefe de que poder y pueblo son la misma cosa en Cuba y eso sí es democracia. Cuando los millones que postulan y eligen evalúen el trabajo de los delegados se estará realizando un acto de soberanía popular que indiscutiblemente nos fortalecerá y servirá para seguir avanzando por el camino correcto.
(Tomado del Partido Comunista de Cuba)