
Efemérides habaneras. 16 de enero
1777. Se comienza a construir en La Habana la Alameda de Paula.
Fue el primer paseo marítimo que existió en la actual capital cubana. Fue construida por el arquitecto coronel de ingenieros Antonio Fernández de Trebejos, quién había participado, como militar, en la defensa de La Habana en 1762 durante la invasión inglesa. Luego, se dedicó a las principales obras habaneras, entre ellas, las casas de Gobierno y de Correos, la Plaza de Armas, el cuartel de Milicias, el teatro del Coliseo o Principal, que dejaron un sello característico en la arquitectura colonial cubana. Dispuso la construcción de la Avenida de Paula, para satisfacer requerimientos urbanísticos del Capitán General Felipe de Fondesviela, Marqués de la Torre.
Inicialmente esta Alameda fue un terraplén con dos hileras de álamos y algunos bancos. Se le denominó con el nombre de Paula, por su cercanía a la iglesia de similar nombre. Entre 1803 y 1805 al paseo se le introdujeron algunas modificaciones. Inicialmente se le embaldosó el pavimento, se le proveyó de una fuente y de asientos o banquetas de piedras. En 1841 se le ampliaron las estrechas escaleras que daban acceso al paseo y se colocaron varias farolas con lo cual resultó más atractivo. Ya en 1845 se le mejoraron sus terraplenes, asientos, su escalera y se erigió una linda glorieta.
En la actualidad la Iglesia y la Alameda de Paula fueron unidas en el año 2000 gracias a un proyecto de la oficina del Historiador de la Ciudad que ha revitalizado el entorno del pequeño templo, convertido desde entonces en capilla del arte sacro contemporáneo cubano.
1922. Se constituye en La Habana la Comisión Atlética Universitaria.
Fue una organización deportiva creada en la Universidad de La Habana. Fue Adolfo de Aragón su primer Presidente con Julio Antonio Mella como secretario ejecutivo.
Era un organismo autónomo con jurisdicción técnica, administrativa y económica, sujeto a la supervisión del Rector de la Universidad.
Esta organización era la encargada de la aprobación y formulación de los calendarios atléticos, de nombrar instructores y entrenadores, además era la responsable de la política deportiva universitaria.
Otras de las funciones de la entidad era luchar contra los clubes privados y la piratería de atletas, que siendo universitarios preferían jugar con los clubes aristocráticos de la ciudad.
1924. Se funda en La Habana la Revista del Archivo del Folklore Cubano.
La revista publicó materiales dedicados al estudio del folklore en sus variados aspectos. Otros trabajos eran traducidos de publicaciones extranjeras especializadas en la materia o escritos de autores cubanos. En 1927 Fernando Ortiz escribió para la revista un artículo titulado “La semiluna de la Virgen de la Caridad del Cobre”.
1934. Fallece en La Habana Rubén Martínez Villena.
Nació en el poblado de Alquizar, entonces provincia de La Habana, el 20 de diciembre de 1899. Desde muy joven reflejó su preocupación por los males que aquejaban a la sociedad cubana y manifestó en su obra poética la angustia íntima que sentía y sus anhelos. Durante su etapa de estudiante universitario adquirió una visión mucho más profunda de la realidad cubana de la época, y muy pronto se convirtió en un revolucionario consecuente al participar activamente en la lucha contra los gobiernos corrompidos y dictatoriales.
Fue uno de los principales participantes en la denominada Protesta de los Trece, acción encaminada a denunciar los turbios negocios que realizaban los funcionarios del gobierno.
En 1927 ingresó en el Partido Comunista y se entregó por entero a la lucha contra la dictadura de Gerardo Machado, a quién denominó “Asno con Garras”. A partir de 1928 dejó de escribir versos y se dedicó por completo a la prosa revolucionaria. Escribió en numerosas publicaciones. Con posterioridad, enfermo de tuberculosis se vio obligado a salir de Cuba. Consciente que se acercaba el fin de su existencia quiso retornar a Cuba para dedicar sus últimas energías a la causa revolucionaria.
Tuvo una relevante participación en la destrucción de la dictadura machadista en agosto de 1933, y pocos meses después, sin otra esperanza que la muerte ya cercana, ingresó en el Sanatorio “La Esperanza”, donde falleció.