1927. Nace en La Habana Amelia Carmen Pita Vega.

Conocida en el mundo artístico como Amelita Pita su vinculación al arte empezó en la infancia al recibir clases de actuación, de ballet y de canto. Fue fundadora de la Compañía Teatral Rita Montaner. Integró también desde su creación el Grupo Teatro Político Bertolt Brecht, bajo la dirección general de Mario Balmaseda, en la que participó en muchas de sus obras, como El carrillón del Kremlin.

A finales de la década del 80 interpretó con gran éxito de público y crítica un monólogo del dramaturgo Héctor Quintero titulado “Aquello está buenísimo”.

En televisión, son recordadas sus intervenciones en las telenovelas cubanas “El año que viene”, y “Si me pudieras querer”. El cine también se enriqueció con su presencia en algunos filmes como, Lucía, Se permuta, Cartas del parque, entre otros.

Realizó también un extenso trabajo como animadora y conductora de programas artísticos.

Falleció en La Habana el 18 de octubre de 2002.

1930. Nace en La Habana Calixto Callava.

Desde la etapa de su niñez se adentró en el cultivo de la rumba en su barrio natal de Belén. Llegó a ser sobre todo un compositor que daría renombre a la rumba cubana. No fue casual que se inclinara desde pequeño por la rumba, influido por la riqueza rítmica del género, además de nacer y criarse en ese barrio habanero, cuna de célebres músicos cubanos.

En el puerto habanero conformo junto a otros músicos  el grupo de guaguancó Marítimo Portuario.

Entre sus obras musicales se encuentran las tituladas La rumba brava, Retozón y Tumbayaya, Lo bailo solo, El callejón de los rumberos, Guaguancó sabroso, Mi guaguancó sí da la hora y Tiembla tierra.

Una de sus últimas creaciones fue Canta la Ceiba, baila la Palma Real, que resultó grabada y popularizada por la prestigiosa orquesta cubana Los Van Van, dirigida por Juan Formell.

Falleció en La Habana el 16 de diciembre de 1990 cuando contaba sesenta años.

1960. Es aprobada en el país la Ley de Reforma Urbana.

En correspondencia con lo expuesto por Fidel Castro en el alegato defensa La Historia me Absolverá, expuesto en 1953, tras el triunfo de la Revolución  se comenzaron a aplicar medidas para transformar la situación que padecían múltiples cubanos en lo referido  a la vivienda y el alto monto de los alquileres.

En esta fecha el Consejo de Ministros del Gobierno Revolucionario de Cuba aprobó la Ley de Reforma Urbana y las de Solares y Fincas de recreo.

Esa ley tenía el fin esencial de otorgar la propiedad de las viviendas a aquellos que las habitaban, quienes por los turbios manejos de propietarios privados indecorosos pagaban alquiler toda una vida sin llegar a poseerlas nunca. También aspiraba  a garantizar una vivienda digna a cada cubano.