Efemérides habaneras. 17 de julio
1911. Nace en La Habana Armando Romeu.
Desde la etapa de su niñez entró en contacto con la música puesto que formó parte de una de las más relevantes familias de creadores musicales. Ya a los diez años tocaba la flauta en la Banda Militar de Regla y cinco años más tarde frecuentaba centros nocturnos de la capital interpretando jazz en compañía de músicos norteamericanos. Sobresalió, además, como un gran saxofonista. En 1932 realizó una gira por Europa con la orquesta Siboney donde tocaba el saxofón y al año siguiente fundó su propia agrupación con la que realizó diversas presentaciones en países de Sudamérica. A partir de 1941 empezó a trabajar en el cabaret Tropicana, donde permaneció durante 25 años. Posteriormente siguió trabajando como arreglista y director de Festivales, entre ellos el de Jazz de La Habana. También dirigió un jazz band y algunos espectáculos de Tropicana que se presentaron en Japón. Además dio su aporte a la docencia al impartir cursos de armonía y orquestación. Se ha catalogado como el maestro por excelencia de cientos de jazzistas cubanos.
Por su relevante labor creativa recibió varias condecoraciones, entre ellas, la Orden Félix Varela de Primer Grado.
Falleció en La Habana el 12 de marzo de 2002.
1962. En el Teatro Charles Chaplin de La Habana el Comandante en Jefe Fidel Castro pronuncia un discurso.
En el Teatro Charles Chaplin de La Habana donde se celebra la Asamblea de los Trabajadores de ómnibus, el Comandante en Jefe Fidel Castro pronuncia un discurso. Señala: “A los trabajadores hay que hablarles con claridad y decirles las verdades, para que las comprendan, para que cada vez vean con más claridad que la Revolución es su destino, que la Revolución es su vida, y que no hay que ser revolucionario de palabras, sino que hay que ser revolucionario de hechos.”
Fidel también detalló: “Desde luego que los trabajadores tienen que ser la vanguardia, y que esa vanguardia tiene que poseer un espíritu fuerte, un espíritu alerta y una gran capacidad de sacrificio.”
1968. Fallece en La Habana el trovador santiaguero Gumersindo Garay, conocido como Sindo Garay.
Desde muy joven él evidenció las condiciones que tenía para componer canciones. Creó su primera obra musical cuando tenía 10 años y se hallaba en las orillas del río Guaso, en Guantánamo. Como compositor llegó a ser muy relevante y fecundo. Aunque no tenía conocimientos musicales creó más de 600 obras, entre ellas, boleros, guarachas, guajiras, criollas y canciones. Logró en sus creaciones acordes que despertaron el asombro y el elogio de prestigiosos directores de orquestas e intérpretes.
Desde el punto de vista del contenido de las letras en sus obras tuvo en cuenta el empleo de una lírica de singular belleza. Se inspiró en la Patria, en el paisaje, en la mujer, en el amor y puede afirmarse que sus composiciones constituyen un fiel reflejo de su amor por la Cuba.
Fue poseedor de una gran simpatía natural. Le gustaba vestirse con la criolla guayabera con corbata negra tipo mariposa y sombrero de jipijapa o castor de ala pequeña.
Fue calificado por músicos, compositores, poetas y otros especialistas como “genio loco del pentagrama”, “esencia y extracto de la música cubana”, “ejemplo de esos singulares talentos que ocasionalmente registra la historia”, “extraordinario músico natural”, o como “poeta nato, verdadero”.
Su nacimiento tuvo lugar en la ciudad de Santiago de Cuba el 12 de abril de 1867.