
Efemérides habaneras. 22 de marzo
1855. Es ejecutado en La Habana el patriota de origen catalán Ramón Pintó.
Fue acusado de promover una conspiración contra el régimen colonial español en Cuba. Aunque en una revisión del proceso que se le siguió se consideró injusta la sentencia y se solicitó que se reabriera la causa, finalmente se le ratificó dicha pena de muerte. Se trató de chantajearlo al proponerle que si revelaba el nombre de otros implicados en la conspiración se le cambiaría la condena y él contestó: “Dejadme morir tan honradamente como he vivido”,
Pintó se opuso a la existencia de la esclavitud en Cuba. Instó incluso a los españoles radicados en el territorio cubano que se mostraran partidarios del establecimiento de una República en Cuba.
Él incluso concibió un plan para contribuir por medio de la persuasión, y la unidad de blancos y negros, ricos y pobres, siervos y amos con el objetivo de alcanzar la independencia de Cuba.
Su nacimiento había ocurrido en la ciudad de Barcelona, España, el 20 de junio de 1803.
1877. Nace en La Habana Jorge Anckerman Rafart.
Inició estudios musicales a los 8 años con su padre, el destacado profesor, compositor y violinista Carlos Anckerman.
En Cuba fungió como director musical en los principales teatros. Compuso partituras de zarzuelas, revistas y juguetes cómicos que alcanzaron notoriedad en la época. En el famoso teatro Alhambra, escenario principal de sus éxitos, estrenó “La isla de las cotorras” y otras significativas obras.
Fue, además, un destacado pianista, contrabajista y director de orquesta. Se le cataloga como el más fecundo de los compositores cubanos puesto que se calcula que creó alrededor de cuatro mil obras en diversos géneros, tales como boleros, rumbas, claves, pregones, criollas, guajiras, danzones y danzas.
Su fallecimiento ocurrió en La Habana el 3 de febrero de 1941.
2013. Fallece en La Habana Enrique Guzmán Rodríguez.
Nació en Muras, Galicia, España, el 28 de agosto de 1931. Cuando contaba 5 años su familia sale de tierra española y se traslada a Cuba.
En marzo de 1962 se gradúa de Doctor en Medicina y hace su servicio social como médico rural. Realiza la residencia de Pediatría en el Hospital William Soler e imparte docencia a los estudiantes de quinto y sexto años de Medicina.
Fue un pediatra, profesor titular y consultante, considerado el Padre de los cuidados intensivos pediátricos en Cuba.
Durante su vida profesional recibió numerosas condecoraciones, entre ellas, el Reconocimiento al Mérito por la Sociedad Boliviana de Pediatría y el Premio Anual al mejor trabajo del Centro Nacional de Investigaciones Científicas en 1988. También fue fundador del Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana. Resultó reconocido y acreditado como intensivista por la Federación Iberoamericana de Terapia Intensiva.