1816.  Nace en La Habana Francisco de Albear y Fernández de Lara

En su quehacer profesional intervino en la realización de unas 200 obras, incluidos proyectos e informes, trabajos parciales y construcciones nuevas y completas. En esta labor figuraban puentes, faros, muelles, carreteras, edificios y fuentes de agua.

Trabajó en la instalación de las primeras líneas telegráficas que existieron en Cuba, en el proyecto de ensanche y reformas del Jardín Botánico de La Habana, el de un edificio para el Observatorio Meteorológico, la construcción de la casa de la Junta General de Comercio y Lonja Mercantil y la de la Cátedra de Agronomía. Además elaboró un proyecto de la carretera central de gran importancia para el país.

La obra que por su magnitud y envergadura lo convirtió en un símbolo  fue la elaboración en 1885 de su proyecto de conducción a La Habana de las aguas de los manantiales de Vento.  

Cada 11 de enero en homenaje a su natalicio se conmemora en el país el Día del Ingeniero Cubano.

Su fallecimiento ocurrió en La Habana el 23 de octubre de 1887.

1818.  Se funda en el Convento de San Agustín de la Habana Vieja la Academia Nacional de Bellas Artes.

A partir de 1832 fue nombrada San Alejandro en memoria de Don Alejandro Ramírez, superintendente general y director de la Real Sociedad Económica Amigos del País.

Con el transcurso del tiempo esta entidad cultural tuvo su asentamiento en distintos lugares de la capital cubana, hasta que en 1962 pasó a un edificio de la avenida 31 y la calle 100, en Marianao.

Renombradas personalidades de la cultura cubana han integrado el claustro de profesores o han egresado de este centro estudiantil.

La Academia de San Alejandro cuenta con un archivo histórico que tiene sus inicios en la misma fecha de fundación de la escuela. Entre sus misiones está registrar y preservar toda la información documental y patrimonial de la Academia a través de un procesamiento metódico de la información.

1960.  La Quinta Estación de Policía de La Habana es convertida en un centro escolar

La tristemente célebre Quinta Estación de Policía en La Habana, uno de los centros represivos de la policía batistiana, fue convertida en centro escolar y entregada al Ministerio de Educación por el Comandante en Jefe Fidel Castro.

En un momento de su discurso Fidel señaló:  “Al pueblo lo podrán bombardear, pero lo que no podrán jamás es conquistarlo, al pueblo  nuestro lo podrán exterminar, lo que no podrán es hacerlo regresar al pasado, al pueblo nuestro lo podrán agredir, lo que no podrán jamás lograr es que se rinda, al pueblo nuestro lo podrán desaparecer de la faz de la tierra, lo que no podrán jamás es vencerlo; porque nuestro pueblo con su razón, con su heroísmo, con su dignidad, con su vergüenza y con su grandeza es un pueblo invencible y es un pueblo al que hay que  respetar”.

1962.   Nace en La Habana Paulo Fernández Gallo (Paulo F.G.)

En su quehacer artístico ha sido reconocido por el pueblo cubano como Paulito F. G.

Ha tenido una admirable carrera en el arte que le ha dado gran aceptación en el país.

Fue integrante de diversas agrupaciones hasta formar su propia banda conocida como la Élite. Con este grupo logró fusionar corrientes como el son, el rock, la balada, el jazz, con una mezcla llena de textos novedosos en los que imprimió además modalidades musicales características de su sello personal.

1980.   Falleció en La Habana la destacada luchadora y dirigente revolucionaria cubana Celia Sánchez Manduley

Su nacimiento tuvo lugar el 9 de mayo de 1920 en el poblado de Media Luna en la zona oriental de Cuba. Cursó la enseñanza primaria en la escuela pública de su tierra natal y luego continuó estudiando en Manzanillo.  Su juventud la pasó después en el poblado de Pilón.

Al realizarse en julio de 1953 el ataque al cuartel Moncada, patentizó su solidaridad con el grupo de jóvenes que habían realizado esa audaz  acción.  Dos años después fue una de las fundadoras en la zona donde vivía del Movimiento 26 de Julio. En 1957 fue la primera mujer en incorporarse al Ejército Rebelde en la Sierra Maestra.

Tras el triunfo de la Revolución trabajó intensa y abnegadamente por el desarrollo y defensa del país. Mantuvo un estrecho contacto con el pueblo.