Yipsi Romo Varona, tiene 39 y 16 años de su vida laboral ha transcurrido en los tribunales. Desde que se graduó de la universidad en el año 2006, comenzó a trabajar como jueza en la provincia de Camagüey hasta que se trasladó para La Habana, donde ha cumplido funciones como jueza en varios tribunales de esta ciudad, en los que ha tenido que ocuparse de varias materias: civil, familia, penal, administrativo y como juez de ejecución.

"Los tribunales, explicó, tenemos la función de servidores públicos, lo que nos pone al servicio del pueblo en la difícil tarea de impartir justicia. Dotando a sus jueces y cuadros de  una gama amplia de conocimientos en distintas materias del derecho, formando parte del currículum profesional de cada juez gozando de prestigio ante la sociedad.”

En la capital comenzó por el tribunal del municipio Cotorro, después pasó a San Miguel del Padrón, a Regla, hasta ser promovida al Tribunal Popular Provincial de La Habana, donde en estos momentos se desempeña como jueza y Jefa del Departamento de Cuadros de la institución.

A la difícil tarea de impartir justicia sumará una nueva responsabilidad, de ser electa este 27 de noviembre delegada de la asamblea municipal del Poder Popular, por la circunscripción 2 del  Consejo Popular Rocafort, en el municipio de San Miguel del Padrón. La exigente y decidida joven desde pequeña pensaba en estudiar Derecho, entonces su deseo era ser abogada defensora. Contó que en esa aspiración incidió su papá que también “era licenciado en Derecho, y veía como defendía los juicios en lo militar”.

“Eso me atrajo, pero ya en la universidad cuando comencé las prácticas, me di cuenta que los tribunales está en la cúspide del derecho. Entonces aquello, me fue llamando la atención”, precisó.

“En manos del abogado, abundó, está defender y demostrar que esa persona es de una forma determinada, del fiscal defender la parte del Estado o de la víctima, pero en manos del juez queda la difícil tarea de identificar quién te está mostrando la verdad, cuál es la carga de la prueba con mayor posibilidad de que se corresponda con la realidad, porque uno nunca va a tener la verdad objetiva, sino la que te muestran. Entonces el juez tiene que tener mucho raciocinio para poder tener una decisión, la intuición necesaria para decidir en cada cuestión y en casos diferentes, ese es un poder exclusivo del juez”.

Con esas premisas y métodos de su profesión aspira accionar en su comunidad con el objetivo de revertir las insatisfacciones que manifiestan algunas personas en relación con la labor de los delegados.

A pocas horas de que los cubanos acudan a las urnas para ejercer su derecho al voto, compartimos con los lectores las valoraciones que Romo Varona ofreció al Portal del Gobierno de La Habana.  La profesional defiende la necesidad de elevar la cultura jurídica que en la actualidad se requiere en todos los sectores de la sociedad.

¿A partir de los cambios implementados en la concepción y organización de los municipios, cuál considera debe ser la función del delegado?

_ El delegado es el encargado de tramitar y gestionar las problemáticas que haya en su radio de acción a las personas encargadas y con poder para dar solución.

La importancia y el reto más grande del delegado está en el trabajo social que hay que realizar con cada una de las personas de ese gran universo que tiene una circunscripción. Es necesario caracterizar a la población, cómo hay que trabajar con cada una de las poblaciones, sean los jóvenes, sancionados, alcohólicos, el que tenga problemas de familias disfuncionales, que a veces funcionan muy bien a la palestra pública, pero a lo interno del hogar hay grandes problemas. Hasta sobre eso hay que tener un dominio, para en algún momento poder determinar cómo proceder. En mi opinión es uno de los grandes retos y algo que está faltando en los delegados que a veces tenemos.

¿Cuéntenos sobre su nominación?

_Tuvo lugar tras un día muy intenso en el tribunal, porque hubo comisión de cuadros, consejo de gobierno y terminamos tardísimo. Pero tenía mi obligación con la tarjetica que me habían dado de la asamblea para la nominación de candidatos. Estaban poniendo los spots y uno sabe que es una tarea civil que se debe cumplir. Sentí orgullo porque con el poco tiempo que llevo en la circunscripción, me propuso un vecino. Me llamó mucho la atención que lo hizo un compañero de la zona, muy preparado pero una persona ya de edad. Casi siempre la población busca personas similares. Y cuando hizo la propuesta, una de las cuestiones que argumentó es que teníamos cuadros muy preparados. Enalteció la posición de mujer, la profesionalidad y la integridad revolucionaria, y eso a uno lo llena, porque durante seis años fui presidenta del Tribunal Municipal de San Miguel del Padrón. También que llevará sólo un año viviendo en este lugar donde fui nominada, porque vivía en otro Consejo. Fue como si se reconociera el poder de acción, eso me causó gran satisfacción.

¿Cómo la nombran en la cuadra?

_Fiscal, ahí tuve que hacer un poquito de trabajo educativo y cívico con las personas, porque cuando le preguntaron bueno y ustedes saben quién es la nominada. Dijeron, sí, es la fiscal. Entonces aclaré que era jueza. Las personas que estaban allí dieron su aprobación unánime. No pensé que hubiesen tantos criterios. Uno piensa que las personas no te observan, pero dieron opiniones relacionadas con la procedencia familiar.

Pudiera hablarnos sobre su familia. 

­_Mi familia está compuesta por mi niño, mi mamá y yo. Somos tres en la casa. Mi hijo Alejandro tiene 14 años, está en una edad difícil. También como todas las madres tengo que velar por su educación porque el papá falleció. Resulta complejo mantener parámetros de vida acorde a los valores que se han ido quebrando tanto en la sociedad. Es un reto, también la educación, y es fundamental guiar esa formación.  

¿Qué labor desempeña en el Tribunal?

 _Tengo que ver con todo lo relacionado con la formación, con los estudiantes y su vinculación con el tribunal, así como la estimulación y preparación de los jueces, cuadros y reserva. Entonces eso lleva un espectro dinámico para sumar jóvenes a la dirección, los que están que se nos mantengan en estos tiempos tan difíciles, de crisis económica. Es una tarea difícil, en un momento en el que tenemos una salida considerable del personal profesional. Hay que buscar otros tipos de alternativas, que no dependa del Estado. Porque cuando vas a ver un asesor jurídico tiene más solvencia económica que un juez. Evidentemente el profesional bien preparado, que tiene en su currículo que es juez, todo el mundo lo capta. Por eso te decía, que todo el que está aquí es porque está enamorado de la profesión, porque es una labor que te atrae, y cuando en un currículo usted pone que es juez, las personas ya saben que es el eslabón más alto de la carrera judicial.  

 ¿Cómo hará para cumplir estas responsabilidades, de ser electa delegada?

_Voy a alternar, tendré que crear espacios. Mi mamá es el apoyo completo, tiene 66 años, y ya el niño que tiene que ir valiéndose por sí.  

En los electores que han depositado su confianza en mí, pienso que puedo lograr cosas beneficiosas porque los veo preocupados por cómo buscar un espacio para interactuar con las personas, y que no interrumpa la vida familiar y laboral. Es decir, veo a los factores involucrados en gestionar cómo la población puede tener un contacto directo con esa persona que salga delegado. Considero que en esa unidad e integración de los factores radica el éxito de su trabajo.

¿Cuáles son sus aspiraciones?

_Tengo muchas ideas y aspiraciones de cómo hacer por esa sociedad que está abogando por alguien que haga y lo represente. Considero que es un logro reunir a los electores porque eso es lo primero que uno tiene que forjar: la confianza de que las personas digan voy a ir a la rendición de cuentas porque mi delegado da respuestas negativas o positivas de cada gestión.  Pero cuando el acuerdo se queda en un papel, y no se le da la información o explicación que requiere la población, esto provoca mayores molestias e insatisfacciones, porque se sienten defraudados, desatendidos.

En la vida profesional tengo aspiraciones, voy a incursionar en una maestría el año que viene y soy reserva del cargo de presidenta del Tribunal Provincial. Es decir que nunca he pensado apartarme de mi tarea y lo que estudié, sino que, con el conocimiento que me ha dado la institución y las herramientas de dirección adquiridas, implementarlas y hacer todo lo posible para incidir en la vida social.

Respecto al acto de elegir, recomendó:

_La población tiene que realizar su ejercicio democrático y hacerlo por la persona que considere más capaz y que tenga vocación para llegar y servir a la comunidad. También al elector que lea bien la boleta y tome en serio el proceso de elección, que no es sólo marcar por marcar. Que el pueblo tenga confianza y asuma con responsabilidad este momento, porque es necesario revertir la opinión de que el delegado no hace nada, no tramita ni gestiona los problemas y las inquietudes de la población.

¿Qué mensaje trasmitiría a la población en relación con la nominación del delegado?

_Recomendaría que hay que confiar y apoyar al delegado que elijan. El apoyo en este proceso es muy importante, porque sin la ayuda de todos los que puedan intervenir no podrá él solo dar solución a las dificultades, porque es una labor en la que cada uno desde su radio de acción puede contribuir para lograr lo que la población espera de esa persona que es su representante ante el órgano del Poder Popular municipal y provincial. 

"El delegado está para tramitar y gestionar. Ahora, usted como vecina plantea un problema en la escuela que está en su localidad. Por poner un ejemplo:  los vendedores están fuera del centro escolar ofreciendo productos que quizás le puedan hacer daño a los niños. Pero fíjese, es una situación de la que el delegado tiene conocimiento, y a la que debe prestar atención y accionar, de lo contrario entonces ese delegado verdaderamente no hace nada. Sin embargo, para poder resolver ese problema, el primer implicado es el director de la escuela, el jefe de sector que atiende la zona, después analizar si los trabajadores por cuenta propia que ejercen la actividad tienen licencias o no para la venta de esos productos, o identificar que otro tipo de manifestaciones trae la conducta de esas personas vendiendo. Pero si uno no une y busca información sobre la problemática, el delegado solo no puede hacerlo. No puede ir con una agenda debajo del brazo, afirmando que es el delegado, y, en este caso, decir al vendedor usted tiene que irse. No es la solución,  porque somos un país de derecho, hay una constitución refrendada por todos, con leyes nuevas, y el pueblo ha adquirido más conocimiento jurídico. Por tanto, hay que comprender y aunar las acciones, pues el delegado solo no puede dar solución a las dificultades. Y eso las personas deben interiorizarlo.