1837.  Se inaugura en Cuba el primer ferrocarril de Iberoamérica

En esta fecha, Cuba se convirtió en el cuarto país del mundo en introducir el transporte ferroviario. En una primera etapa el tren que salía de La Habana no llegó hasta Güines, como se había proyectado, sino a Bejucal, a unos treinta kilómetros de la capital. Un año después se completó el proyecto. Transportaba tanto carga como pasajeros.

1888.  Nace en La Habana José Raúl Capablanca

Desde la edad de cuatro años, se hizo evidente su gran amor por el juego ciencia, cuando derrotó a su padre en una partida que celebraron. Al año siguiente cuando visitaba junto a su progenitor el Club de Ajedrez de La Habana enfrentó a varios de los experimentados jugadores del país. A los doce años ya era campeón de Cuba, y a los 23 años campeón  panamericano.

El 21 de marzo de 1921, obtuvo la condición de Campeón Mundial de Ajedrez, título que retuvo hasta 1927.

Tuvo una vida relativamente breve, ya que falleció a la edad de 53 años cuando presenciaba una partida de ajedrez en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, el 8 de marzo de 1942.

1900.  Se funda en La Habana la Escuela de Cirugía Dental

La institución se inició al amparo de la Orden 266 de fecha 30 de junio de 1900, en un caserón de las calles Zanja y Belascoaín. Contó con tres profesores, que empezaron sus actividades docentes sin ser nombrados. Sobre la fundación de la Escuela de Cirugía Dental, Pedro Calvo Castellanos, fundador de la mayoría de las instituciones dentales de Cuba, expresó: “Fundar la escuela era reivindicar al dentista, reivindicar al dentista era mejorarlo, mejorarlo era dar una gran garantía moral ciudadana, una ofrenda más a la caridad, una nueva ayuda a la nación, un empuje vigoroso a la ciencia”.

Gracias al impulso del intelectual Enrique José Varona esa escuela quedó adscripta a la Facultad de Medicina y Farmacia de la Universidad de La Habana.

1933.  Fallece en La Habana Enrique José Varona

Calificado como hombre de dos siglos, por haber desenvuelto su existencia entre la segunda mitad del siglo XIX y los primeros decenios del XX, llegó a ser una relevante figura, considerada por muchos como maestro de múltiples generaciones de cubanos.

Su nacimiento tuvo lugar el 13 de abril de 1849 en la actual ciudad de Camagüey.

Con el decursar de su existencia logró graduarse de doctor en Filosofía y Letras en la Universidad de La Habana.

A pesar de tener una salud precaria se incorpora a la guerra por la independencia de Cuba pero después al hallarse enfermo tiene que regresar a su hogar, cuestión que se agrava a partir de 1875, cuando se hacía evidente que la pujanza de la lucha comenzaba a decrecer.

En 1880 se traslada hacia La Habana y comienza a impartir conferencias sobre temas filosóficos y se aproxima también a los círculos intelectuales. Inicialmente Varona se vinculó al Partido Liberal Autonomista.  En 1884 es designado Diputado a las Cortes.

Años después se vinculó con José Martí el que lo calificó como flor de mármol.

Cuando se reinicia la lucha por la independencia en 1895 Varona contribuye a su desarrollo atendiendo al periódico Patria. Primero había colaborado como redactor y desde que Martí se traslada hacia Cuba él asume la dirección de dicha publicación. 

Enrique José Varona ejerció también el magisterio así como prologó diversos libros.

En los años de la década del veinte fue reconocido por la juventud universitaria cubana como su maestro por la digna actitud que mantuvo contra la dictadura machadista.

Varona sin dudas fue la figura más relevante del quehacer cultural cubano a fines del siglo XIX y primer tercio del XX.

Fue políglota, escritor, periodista, filósofo y maestro. Al caracterizar en una ocasión su vida él llegó a decir: “Fui un simple ciudadano consagrado a la causa de la cultura de Cuba, que es como podía ayudar a que nuestra patria viviera en paz y sosiego y levantara de día en día su nivel.

También enfatizó: “Respeta tu pensamiento; no lo prostituyas, no te hagas traición a ti mismo.”

1961.- El Comandante en Jefe Fidel Castro  clausura en La Habana la primera Plenaria Nacional de los Consejos Voluntarios Deportivos del  Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación, INDER

Destacó que la Revolución tiene que ocuparse de la educación física y el deporte como una cuestión fundamental para el país.

También Fidel precisó que el país necesita de la educación física y necesita del deporte y añadió:  “La Revolución no podía desentenderse de esa preocupación.  Si la Revolución se desentendiera de esa preocupación, estaría descuidando un punto fundamental, que hará posible, en el futuro, una ciudadanía más saludable y mejor, como aspiramos a tener.”

En años posteriores en Plenos Nacionales  de Corresponsales Deportivos Voluntarios, de los Consejos Voluntarios Deportivos,  de Historiadores   del Deporte y de activistas que periódicamente tuvieron lugar los participantes en esos eventos se pronunciaron por el hecho que se instituyera en Cuba una fecha como Día de la Cultura Física y el Deporte.

Atendiendo a ello el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros aprobó el Decreto emitido el día 26 de enero de 1985 que fijó el 19 de noviembre para tal celebración, en recordación al día en que Fidel en el año 1961 expuso consideraciones significativas sobre el deporte.

Fue la provincia de Pínar del Río la que se escogió como sede para el acto central por el 19 de noviembre, Día de la Cultura Física y el Deporte que se celebró por vez primera el sábado 16 de noviembre de 1985.

Después del toque de atiendan todos, se escuchó la grabación de las palabras pronunciadas por Fidel el 19 de noviembre de 1961 durante la clausura de la Primera Plenaria Nacional de Activistas y Consejos Voluntarios Deportivos.