1826.   Nace en La Habana Joaquín Lorenzo Luaces.

Estudió latinidad en el Colegio Calasancio de Santa María del Puerto del Príncipe, hoy Camagüey, lugar donde  residía su hermano.

A partir de 1840, realizó estudios en el Colegio Seminario de San Carlos, de La Habana. Se graduó de Bachiller en Artes en 1844. Continuó estudiando en la Universidad de La Habana. Desde 1848 participó en la tertulia literaria y científica que presidía Felipe Poey, figura en la historia de las ciencias en Cuba. Esas tertulias se celebraban en la casa de Poey en la calle Amistad, en el actual municipio Centro Habana. Allí leyó sus primeros ensayos. También dio a conocer algunas poesías ligeras y festivas que no recogió en sus obras.

En 1856  en unión de su gran amigo el poeta bayamés José Fornaris, editó La Piragua, periódico que aspiraba a ser órgano del siboneyismo  y en el que dio a conocer poemas, cuentos y otros trabajos en prosa.

También publicó trabajos en importantes revistas, entre ellas Brisas de Cuba, El Cesto de Flores, Floresta Cubana, Revista de La Habana, El Kaleidoscopio, Revista Habanera y Cuba Literaria; así como en varios periódicos. Obras suyas aparecieron en las compilaciones Aguinaldo habanero y Noches literarias en casa de Nicolás Azcárate.
En 1859 recibe el premio del Liceo de La Habana por su oda A Ciro Fiel por la inmersión del cable submarino. Escribió otros poemas  así como el drama El mendigo rojo, en 1859 y la tragedia Aristodemo, en 1867.

Sus obras teatrales más conocidas fueron  El becerro de oro, El fantasmón de Aravaca y Una hora en la vida de una calavera, ésta última, resultó ser la única que pudo estrenar en vida.

Su fallecimiento ocurrió en la capital cubana el 7 de noviembre de 1867.

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2006.  Fallece en La Habana Antonio Eddy Martín.

Llegó al periodismo por vía de la radio. Se inició en 1944 en la emisora CMJH, de Ciego de Ávila, a la que llamaban "La voz de la RCA Víctor", haciendo un noticiero deportivo. A partir de 1947 incursionó en la prensa impresa en el semanario Cuba Deportiva y América Deportiva. Al año siguiente, en La Habana, trabajó como narrador deportivo. Durante la etapa de la dictadura militar reaccionaria de Fulgencio Batista, entre 1952 y 1958, sufrió dos veces prisión por haber prestado su colaboración a la lucha revolucionaria.

Tras el triunfo de la Revolución, en enero de 1959,  empezó a colaborar en el Periódico Noticias de Hoy, el Periódico Revolución y la Revista Bohemia. Después igualmente trabajos suyos salieron reflejados en los periódicos Granma y Juventud Rebelde, además en las publicaciones del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación, INDER. Unido a ello laboraba en las trasmisiones de eventos deportivos a través de la radio y la televisión.

Participó en la trasmisión de Olimpiadas, Campeonatos Mundiales, Juegos Panamericanos y Centroamericanos, así como en otros eventos deportivos a nivel nacional e internacional. De manera muy especial sobresalió por su elegante manera, y a la vez, muy documentada forma, de narrar el desarrollo de los juegos de pelota de las series nacionales de Cuba.

Por su meritoria labor recibió diversos premios y reconocimientos, entre otros, la Distinción Por la Cultura Nacional, la Réplica del Machete de Máximo Gómez y la Réplica del Machete de Serafín Sánchez, el Premio Nacional de Periodismo José Martí por la obra de su vida y el título de Héroe del Trabajo de la República de Cuba.