Una mirada histórica a la celebración en Cuba del Día Internacional de los Trabajadores
En Cuba el Primero de Mayo, Día internacional de los trabajadores, es una de nuestras fechas nacionales. En 1890 se celebró en La Habana por primera vez ese histórico día.
Particularmente durante el siglo XX, hasta 1958, el primero de mayo constituyó una jornada de lucha de los trabajadores cubanos en defensa de sus intereses y en el enfrentamiento a gobiernos corrompidos y a dictaduras que existieron en el país.
Tras el triunfo de la Revolución Cubana en enero de 1959 la fecha del primero de mayo cobró otra connotación muy significativa.
Precisamente el Primero de Mayo de 1959 en la entonces denominada Plaza Cívica, en La Habana, convertida en 1961 en Plaza de la Revolución “José Martí” se celebró el primero de mayo con un carácter festivo con la presencia de miles y miles de trabajadores.
En esa ocasión habló el Comandante Raúl Castro, puesto que el máximo de la Revolución, Fidel Castro, no se encontraba en Cuba. Viajaba ese día en dirección a Buenos Aires, Argentina, para participar en una conferencia internacional.
Ya en 1960 y después en sucesivas ocasiones Fidel habló en las concentraciones populares y desfiles con motivo del día internacional de los trabajadores.
Y en reiteradas oportunidades destacó el papel de los trabajadores en la defensa y desarrollo de la Revolución, la importancia de la unidad obrero campesina, y otros temas de gran trascendencia.
Por ejemplo el primero de mayo de 1962 al apreciar cómo se festejaba en Cuba el día internacional de los trabajadores Fide señaló: “¿Qué significa, pues, el júbilo y la concurrencia multitudinaria de la clase obrera un día como hoy, a un acto como este, en un desfile como el que acabamos de presenciar en nuestro país?”
Y agregó: “Significa la gran realidad, la hermosa realidad, la realidad de que los trabajadores amanecen jubilosos con las primeras luces de la mañana; haciendo silbar las sirenas de todas las fábricas comienzan la conmemoración de este día de la clase obrera; y los trabajadores todos se movilizan, desde semanas atrás vienen movilizándose y preparándose, para hacer más hermoso y más lúcido este día.”
También Fidel precisó: “Eso quiere decir la realidad hermosa de que nuestro país es un país donde ha cesado la explotación imperialista, donde ha cesado la explotación capitalista, y donde tiene lugar una profunda revolución social; en que los trabajadores dejaron de ser la clase oprimida y la clase explotada, para ser la clase que rige los destinos de la nación cubana.”
Diez años después también el primero de mayo de 1972 Fidel aseguró: “La Revolución es sólida. La Revolución es fuerte. La Revolución no es la obra de un día ni de un año; es obra para siempre en lo adelante. Es una obra eterna, en la cual el actor fundamental es el pueblo, los trabajadores”
Y en el 2000 en el acto por el día internacional de los trabajadores Fidel expuso consideraciones muy elocuente en torno al significado y características de la Revolución. Aseguró:
“Revolución es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado; es igualdad y libertad plenas; es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos; es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos; es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional; es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio; es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo; es luchar con audacia, inteligencia y realismo; es no mentir jamás ni violar principios éticos; es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de la verdad y las ideas. Revolución es unidad, es independencia, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo.”