Varios de los miembros de la serie Calendario, que hace apenas dos semanas comenzó a rodar su segunda temporada, se dieron cita en la Comunidad en transformación Nueva Creación, en el habanero municipio de Cotorro.

Madelys Delgado Reinaldo, secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), en La Habana, agradeció la asistencia de los vecinos de la comunidad este 7 de abril, en ocasión del cumpleaños 92 de Vilma Espín, que, “dedicó su preciosa vida a luchas por la igualdad, la emancipación y la justicia”.

Igualmente calificó a la serie Calendario como un espacio de debate y reflexión de la familia cubana en cada uno de sus capítulos, agradeciendo la presencia de parte del elenco de la serie televisiva.

Durante el encuentro, al cual acudieron Tamara Garrido González, primera secretaria del Comité Municipal del Partido en el Cotorro; Anieska Fernández de Monte, miembro del secretariado de la dirección nacional de la FMC; y Yaima Valle Barrios, vicepresidenta de la Asamblea del Poder Popular en el municipio, los miembros de Calendario dieron algunos avances de lo que puede pasar en la segunda temporada.

De esa forma, los asistentes al encuentro conocieron de voz de la “profe Marta” que en la segunda temporada su personaje trae sorpresas, y entre las presiones del público y picarescas sonrisas, dio a entender que, gracias a las sugerencias de los presentes, tal vez en la “tercera temporada” su personaje pueda crecer mucho con una relación amorosa.

Mientras tanto, la más joven de las representantes de Calendario, la “urraca” Inés, bromeó con desenfado, calló con discreción, y reflexionó con las jóvenes presentes sobre la importancia de no quemar etapas, para evitar tengan un final de “temporada” como el que vivió ella. Acerca de lo que se le avecina en la segunda temporada se limitó a comentar que “está compleja” y que se les verá ahora un año después, cursando ya el 11no grado.

Belkis, la mamá de la niña adicta a la tecnología, tampoco ofreció muchas pistas sobre lo que vendrá, sin embargo, fue enfática en la necesidad de no dejar que las tecnologías nos dominen. Recalcó que es importante que las madres, y los padres, prediquen con el ejemplo, que dosifiquen el tiempo que los niños les dediquen a las tecnologías, lograr que salgan a jugar al parque, a correr, que hagan ejercicios, sacarlos de la silla. Agregó que hay que ver donde se meten los niños en internet, porque “todo lo que se ve en internet no es verdad, y hay que estar alertas con quienes se conectan en internet. Mamás, papás, tíos, abuelos, hay que ponerle el ojo a lo que hacen los hijos, y tener cuidado con lo que uno hace también”.

Al mismo tiempo, entre bromas, esquivó la pregunta de cómo acepta ella la relación entre su hija Noemí y Orestes, pues su personaje no se ha enterado de lo que hay entre ellos, y además, no puede decir nada, pues de eso va a tratar la segunda parte de la serie.

Quienes tampoco brindaron pistas fueron Rachel y Mariela, dos asistentes de dirección que se acaban de incorporar en esta segunda temporada y que si bien destacaron lo complejo del guion, prefirieron no regalar nada, porque el más mínimo detalle puede hacer que el espectador encuentre la punta de la madeja. Sin embargo, sí comentaron que en la siguiente entrega se podrán ver, entre otros actores, a Natacha, Yaquelín Arenal, Roberto Perdomo, Omar Alí y Denis Ramos.

En la jornada, se entregó el carné de miembros de la FMC a un grupo de muchachas pertenecientes al bloque 80 de la organización femenina. La Federación en la capital, igualmente, entregó el Sello 60 Aniversario de la organización a Isaymi Dinza Pluma, así como reconocimientos, a la dirección de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM) y la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en La Habana.

La cultura se hizo cargo del cierre de la actividad. Allí se pudo escuchar declamar poesía y disfrutar de la buena música, con actuaciones de gran acogida por parte del auditorio, con especial destaque para el Proyecto Afrodiverso, con las presentaciones de Reinier, el niño (Regla Gómez Calderón), y Alberto el salsero (Argelia Fellové Hernández), quienes pusieron a bailar a los presentes.