El mandatario insistió en la necesidad de mejorar las infraestructuras, así como de trabajar en la espiritualidad de las comunidades.
   Participar y controlar para que los recursos se aprovechen fue otro llamado de Díaz-Canel en La Purísima, uno de los más de 100 barrios vulnerables de La Habana donde Organismos de la Administración Central del Estado, el sector no estatal, trabajadores sociales y vecinos transforman las comunidades.
   En su recorrido, y acompañado del primer secretario del Partido en La Habana Luis Antonio Torres Iríbar, y del Gobernador Provincial, Reinaldo García Zapata, el mandatario visitó el consultorio médico, el supermercado, la escuela primaria Luis de la Puente Uceda, el Jardín Pioneros del Futuro, instalaciones donde se han realizado obras constructivas.

   En esta comunidad de casi dos mil vecinos, se han vertido más de cuatro mil toneladas de asfalto en los viales, y actualmente se remodela la clínica veterinaria, el mercado agropecuario estatal, y  el punto de venta de gas licuado.
   Allí han sido beneficiados con asistencia económica y de otro tipo 94 núcleos vulnerables, 12  discapacitados, 10 madres con tres hijos o más, y 31 desvinculados del estudio y el trabajo.
 De las 83 obras planificadas para su restauración, hasta la fecha se han ejecutado 75.