La capital de Cuba cuenta con diversos restaurantes, varios de los cuales gozan de gran celebridad, como son los casos del Floridita, la Bodeguita del Medio, el Emperador, el 1830, el Monseigneur y El Aljibe, por tan sólo citar estos a manera de ejemplo.

El último de los restaurantes citado, es decir el que se identifica como El Aljibe, es un sitio muy aceptado por su trato cordial, su ambiente familiar y su comida cubana, que cuenta con más de medio siglo de tradición familiar.

Hay quienes afirman que el secreto del  hechizo de esta instalación está en el sabor de la especialidad exquisita y exclusiva de la casa, el pollo asado El Aljibe ofrece el pollo acompañado de los tan famosos frijoles negros, o frijoles negros “dormidos”, como se les conoce también popularmente, además de arroz, ensalada y papas o plátanos fritos.

El Aljibe surge en 1946 por idea de Alberto Modesto García, un campesino que vivía en la finca de igual nombre y quien junto a familiares y un grupo de amigos, decidió alquilar un restaurante, abandonado desde los años de la década del veinte.

A Alberto se le ocurrió ofrecer la comida que hacía su mamá, un plato típico de cualquier casa cubana, el que tuvo una rápida aceptación entre turistas estadounidenses.

Al percatarse del fructífero negocio el dueño de la finca subió el impuesto de 40 a 300 pesos, lo cual obligó a Alberto a trasladarse junto con su familia a un kilómetro de allí y fundar, en 1950, el restaurante Rancho Luna del Wajay.

Resultó identificado así por presentar aspecto de rancho, desprovisto de paredes, con gruesas columnas de madera y techo de guano y con el piso decorado con una media Luna rodeada de estrellas.

Todo esto ocasionó la quiebra de El Aljibe. Con el decursar de poco tiempo el restaurante Rancho Luna se convirtió en el número uno de los centros de su tipo de La Habana en los años de la década del cincuenta.

En 1991 el Grupo Cubanacán decidió abrir un restaurante teniendo en cuenta el concepto del Rancho Luna pero con techo de guano, taburetes y mesas de madera, rodeado de vegetación y que expendiera la misma comida criolla que hizo popular a El Aljibe en  sus inicios. Entonces se contactó con el que había sido el fundador de El Aljibe y después del Rancho Luna.

Tres años después nació el nuevo restaurante tal y cómo fue concebido cinco décadas atrás, pero con su nombre original, El Aljibe.

Además de la especialidad, pollo en todas sus variedades, el cliente puede  solicitar langosta y pescado grille, masas de cerdo frita, espaguetis y hasta la deliciosa “Sopa de la Abuela”, muy solicitada por el visitante.

Este restaurante, que pone muy en alto el nombre de Cuba, tanto nacional como internacionalmente, es referente obligado para el turista que quiera acercarse a la cocina criolla de primer nivel.

El Aljibe ha sido visitado por destacadas figuras nacionales y extranjeras, como el Premio nobel de literatura Gabriel García Márquez, los boxeadores Mohamed Ali, y Rocky Marciano, además de afamados artistas.

El célebre restaurante se localiza en séptima y 24 en la zona de Miramar, en el municipio Playa.  También muy útil e interesante resulta el libro “El Aljibe un estilo natural”, escrito por dos de los integrantes de la familia García, Alicia y Sergio. En sus páginas, escritas con el amor y la dedicación que le profesaron sus abuelos, se recoge la historia del esfuerzo, empeño y dedicación de esta familia. El mismo incluye un recetario con más de 200 platos  tradicionales de nuestra mesa.