LA ACADEMIA ARTES PLASTICAS SAN ALEJANDRO
Con excepción de la Universidad de La Habana, el centro de enseñanza superior más antiguo en Cuba y en Hispanoamérica, es la Academia Nacional de Artes Plásticas San Alejandro que fue fundada el 11 de enero de 1818 en el convento de San Agustín en La Habana Vieja. La Academia fue nombrada a partir de 1832 "San Alejandro" en memoria y homenaje a Don Alejandro Ramírez, quién fue Superintendente general de Cuba y director de la Real Sociedad Económica de Amigos del País.
Su creación guardó relación con la necesidad de reformas en el territorio cubano durante el siglo XIX, en el clima de la proclamación de la Constitución de Cádiz de 1812 en España y el despotismo ilustrado. El Centro quedó establecido por la Real Sociedad Patriótica y el Real Consulado de la Ciudad de La Habana, como una Escuela Gratuita de Dibujo y Pintura.
Su primer director fue Juan Bautista Vermay. Su nacimiento tuvo lugar en Tournai, Francia, en 1784. Llegó a Cuba cuando tenía 31 años. Todo indica que el Obispo Espada y Landa deseando restaurar algunos antiguos lienzos que había en la Catedral de La Habana, traídos por los Jesuitas a Cuba, escribió hacia 1814 al famoso pintor aragonés Francisco de Goya para que le enviase un artista capaz de ejecutar tanto los trabajos de restauración como otros que se le encargasen.
Se afirma que Goya le trasmitió el encargo a un amigo de París y que éste le recomendó al joven Vermay que se destacaba por su apego al neoclasicismo. Después de cumplida la tarea que le encomendaron en La Habana, él recibió el apoyo para la creación de la Escuela de Artes Plásticas. Entonces en el territorio cubano él abrió el camino de los estudios académicos de las artes plásticas y del aprendizaje sistémico por medio de talleres para la enseñanza.
En sus años de existencia la Academia Nacional de Artes Plásticas San Alejandro ha sido dirigida por prestigiosos artistas, tanto cubanos como extranjeros, muchos de los cuales tras concluir su formación en dicho centro pasaron otros estudios de perfeccionamiento en distintas escuelas europeas de Italia, Francia y España. Entre ellos se destacan Joseph Leclere que ejerció la docencia e inauguró las clases de modelado en la escuela en 1848; Federico Mialhe, paisajista y notable científico italiano que ocupó la dirección en 1850 y reafirmó el paisaje en la pintura del siglo XIX; Miguel Melero quien fue un reformador en el uso del color; Leopoldo Romañach y Armando Menocal que abrieron el siglo XX con nuevos conceptos en la enseñanza; Esteban Valderrama y Peña destacado retratista; Enrique Caravia; Florencio Gelabert; así como Carmelo González quien fundó en 1957 la Asociación de Grabadores de Cuba y amplió la enseñanza al incorporar el grabado sobre madera, xilografía y la calcografía.
La Escuela San Alejandro ha sido uno de los centros de enseñanza para artistas de la plástica de mayor prestigio del país, donde distintos movimientos renovadores han brillado con el decursar de los años. Por sus aulas y talleres han transitado quienes después se han convertido en importantísimos creadores cubanos que con su labor han situado a nuestro arte en una posición destacada a nivel mundial. Entre ellos se pueden mencionar los escultores Teodoro Ramos Blanco, Domingo Ravenet, Félix Cobarrocas, Juan José Sicre, Rita Longa, Agustín Cárdenas; así como los pintores y grabadores de la talla de Victor Manuel, Fidelio Ponce de León, Jorge Arche, Mario Carreño, Eduardo Abela, Carmelo González, Raúl Martínez, Servando Cabrera Moreno, Tomás Sánchez, Juan Moreira, Flora Fong, Roberto Fabelo y Cesar Leal.