CENTRO GALLEGO DE LA HABANA
El edificio que hoy ocupa la escuela primaria Concepción Arenal, ubicado en Prado 573-575 esquina a Dragones, en La Habana Vieja, correspondió al otrora Centro Gallego.
Fue en este inmueble donde los inmigrantes de Galicia ubicaron la primera sede de su asociación hacia 1880.
Un año antes, el 23 de noviembre, se reunieron una docena de gallegos en el Teatro Tacón para fundar la Sociedad Centro Gallego de La Habana.
Todo comenzó por la ardua iniciativa de Waldo ÁlvarezInsúa, un inquieto joven, natural de La Estrada, comarca gallega, quién llegó a la Villa de San Cristóbal de La Habana en 1877.
Insúa no más llegar a La Habana fundó el semanario Eco de Galicia, el primer periódico con salida estable que tuvieron en América los inmigrantes de esa región española.
En sus páginas Waldo, con valentía, combatió contra quienes traían a Cuba inmigrantes gallegos en condiciones de semiesclavitud.
Desde ese seminario, el día 12 de octubre de 1879, dirigió a sus coterráneos un llamado para fundar la institución que iba a ser conocida como “el muy ilustre Centro Gallego de La Habana”.
En Prado y Dragones, el 11 de enero de 1880, se celebró la fiesta inaugural. En ese entonces el Centro Gallego contó con un inmueble, aunque solo fuese una desvencijada cochera. Diez años luego los afiliados decidieron reestructurar el decorado del lugar cuyas obras estuvieron a cargo del maestro José Mato Requeijo.
Durante el primer cuarto de siglo, la colonia gallega llegó a ser la más significativa, alcanzando el 37 % de la población española radicada en Cuba, seguida por la asturiana.
La principal actividad económica de los gallegos en la que se destacaron fue el comercio, sin embargo, no obviaron la importancia de la educación junto a la conservación de su cultura y tradiciones.
Para ello construyeron escuelas o instalaron planteles en sus centros de recreo como lo fue el Concepción Arenal, nombrado así desde 1906, pero constituido desde la propia fundación del Centro para la instrucción Primaria, Elemental, Superior y Adorno como ellos le llamaban.
Entre 1887-1888, la matrícula ascendía a 763 alumnos de La Habana y otras provincias de Cuba y Galicia.
Un hecho relevante en este inmueble ocurrió en 1887 cuando el Centro Gallego propagó la vacuna contra la varicela gratuitamente al pueblo.
En 1894 le suman al plantel clases de solfeo, piano y canto para las mujeres, por lo que realizan nuevas divisiones para aumentar el número de aulas.
Entrado el siglo XX, la asociación gallega decide ubicarse en una nueva y más elegante residencia.
Es entonces que adquieren la manzana donde estaba enclavado el antiguo Teatro Tacón (hoy identificado como El Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso) con el propósito de reedificarlo para su nueva instalación.
El Centro Gallego mantuvo la propiedad de la escuela hasta el proceso de intervención realizado en Cuba posterior al año 1959 en que pasó al Estado cubano, manteniendo su función de plantel educativo e igual nombre.