La antigua Villa de San Cristóbal de La Habana tuvo su tercer y definitivo asentamiento cerca de la entrada de la bahía en el año 1519.

Cuenta en la actualidad con 727 kilómetros cuadrados de superficie y su población se calcula en más de dos millones de habitantes.

La provincia La Habana se divide en 15 municipios y 105 consejos populares. 

El municipio de mayor superficie es La Habana del Este y el más pequeño es Centro Habana y los más poblados son Diez de Octubre y Arroyo Naranjo, respectivamente.

El territorio de la provincia se halla en la zona de la Llanura Habana-Matanzas. 

Limita al norte con el Estrecho de La Florida, con 42 kilómetros de costa, al este y parte del sur con la provincia de Artemisa y al suroeste y oeste con la provincia de Mayabeque.

El relieve es generalmente llano aunque incluye algunas elevaciones próximas a la costa, de poca altitud, pertenecientes al sistema de las Alturas Habana – Matanzas y al sur, la provincia limita con el grupo de las Alturas Bejucal – Madruga – Coliseo. 

Entre uno y otro sistema orográfico se encuentran fértiles valles intramontanos.

La provincia  de La Habana está surcada por varios ríos, el mayor de los cuales es el Almendares que antaño era identificado por los primitivos habitantes del territorio como Casiguaguas.

A varios kilómetros de distancia, al este de la entrada de la bahía, la provincia cuenta con varias áreas de playas que suelen ser ampliamente disfrutadas por miles de personas, particularmente en la época de intenso verano.

La provincia La Habana es el principal polo turístico de Cuba y la mayor región industrial.

También como capital del país tienen su sede el Partido Comunista de Cuba y otras organizaciones políticas, de masas y sociales, la dirección del estado y el gobierno,  ministerios y otros organismos centrales, destacadas instalaciones culturales y científicas relacionadas con la salud y el deporte.

La provincia tiene un elevado nivel de urbanización, el 60 por ciento de su área y una variada arquitectura caracterizada por su eclecticismo.

Por su relevancia histórica y arquitectónica el centro histórico urbano de La Habana ostenta la condición de Monumento Nacional y de Patrimonio Cultural  de la Humanidad, condición que le fuera otorgada en 1984 por la Convención del Patrimonio de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la cultura, UNESCO.

La Habana Vieja, con sus antiguas plazas, castillos y otroras fortalezas militares, así como añejas edificaciones de gran valor arquitectónico, es fuente de gran atracción turística y resulta visitada por múltiples hombres y mujeres de diferentes partes del mundo.

La Habana recibió en junio del 2016 formalmente el título de "Ciudad Maravilla" al ser elegida por miles de personas en el tercer concurso anual que convoca la fundación suiza New 7 Wonders, por su "atractivo mítico, lo cálido y acogedor de su ambiente, y el carisma y jovialidad de sus habitantes".