MUSEO NACIONAL DE LOS TRABAJADORES CUBANOS
En el antiguo Palacio de la Sociedad de Torcedores, en el municipio Centro Habana, se localiza desde abril del 2013 el Museo Nacional de los Trabajadores Cubanos.
Ya desde finales del primer cuarto del siglo XX el Gremio de torcedores de Tabaco de La Habana empleó fondos para la creación de una Sociedad que fue inaugurada el 14 de julio de 1925 y que se popularizó con el nombre de Palacio de los Torcedores.
Entre sus principales objetivos se destacaron, la búsqueda de cohesión entre los miembros del gremio, manufactureros y agrícolas; el proporcionarse ayuda de diverso tipo, y muy especialmente, la elevación de su cultura.
El local social de los tabacaleros habaneros cumplió una importante tarea cultural a favor de los trabajadores del ramo mediante su biblioteca, sus aulas de superación y su salón de actos, pero también cedió su espacio al funcionamiento de la Universidad Popular “José Martí” cuando ésta no pudo seguir funcionando en la Universidad habanera.
También en el Palacio de los Torcedores tuvieron lugar reuniones y actividades de la Liga Antimperialista de Cuba, así como fue sitio solemne para rendir tributo póstumo a determinados trabajadores del ramo y a algunos de los más valiosos líderes del proletariado cubano como Rubén Martínez Villena, Aracelio Iglesias y Carlos Rodríguez Careaga, entre otros.
También allí estuvo la dirección de la Confederación de Trabajadores de Cuba encabezada por Lázaro Peña, cuando ésta fue expulsada de su edificio sindical por la violencia de la guerra fría y la imposición en la dirigencia obrera de una camarilla de personajes siniestros.
Tras el triunfo revolucionario, en 1959, se instaló en el Palacio de los Torcedores el Museo Histórico del Movimiento Obrero.
Allí se atesoraron valiosos fondos del movimiento obrero y sindical cubano hasta su traslado en 1977 al Instituto de Historia del Movimiento Comunista y la Revolución Socialista así como en otras instituciones.
Varios decenios después la dirección de la Central de Trabajadores de Cuba se propuso reconstruir ese local de la Sociedad de Torcedores, recuperándolo como sitio de homenaje y de cultura y de reconocimiento de todo aquello que caracterizó al movimiento obrero y sindical cubano en los años difíciles de la lucha contra el capital, y de permanencia obrera desde lo que implica la presencia de los trabajadores en el poder de la nación.
Fue así como resultado de la labor realizada se logró crear el Museo Nacional de los Trabajadores Cubanos que ofrece una amplia y valiosa colección fotográfica que recorre todos los momentos trascendentes en el desarrollo del movimiento obrero y sindical cubano desde sus orígenes hasta la actualidad.
Es a su vez un centro de cultura en el que se realizan encuentros, actos de reconocimiento y homenaje a trabajadores destacados, así como eventos de la Central de Trabajadores de Cuba y sus sindicatos y actividades culturales en sentido general.